La inspiración encestadora del alero Kevin Durant y del escolta reserva James Harden en los momentos decisivos fueron la clave que permitió a los Thunder de Oklahoma City vencer 108-103 a los Spurs de San Antonio en el quinto partido de las finales de la Conferencia Oeste.
La victoria fue la tercera consecutiva y los Thunder han remontado una desventaja de 0-2 y ponerse a sólo un triunfo (3-2) de alcanzar por primera vez las Finales de la NBA desde que están en Oklahoma City.
El sexto partido se jugará el próximo miércoles en Oklahoma City y si los Spurs ganan habrá un séptimo que se disputaría el viernes en San Antonio.
Durant, que en la primera parte no estuvo acertado en el juego ofensivo, volvió a surgir cuando más lo necesitó su equipo, en la segunda, en la que anotó 22 de los 27 puntos que aportó al concluir el partido, además de repartir cinco asistencias, capturar cuatro rebotes y recuperar tres balones.
“Todo el equipo volvió a creer en lo que podíamos conseguir en el campo y ahora estamos más cerca del gran objetivo de alcanzar las Finales”, declaró Durant. “La aportación de mis compañeros fue la decisiva”, añadió.
Como la que dio Harden, que de nuevo anotó un triple espectacular cuando faltaban 28 segundos para lograr un parcial de 101-106, que rompió la remontada de los Spurs y las esperanzas de cuando menos forzar la prórroga después de haber estado abajo 12 puntos (88-100) con 5:22 minutos por disputarse.
Harden consiguió 20 puntos, incluidos tres triples, cuatro rebotes, tres asistencias y recuperó dos balones que le dejaron como el sexto jugador del equipo y del partido.
Mientras que el base Russell Westbrook aportó un doble-doble de 23 puntos, 12 asistencias, cuatro rebotes y cuatro recuperaciones de balón que le colocaron como el segundo máximo encestador, aunque, sin embargo, cometió seis perdidas de balón, dos en los últimos minutos del cuarto periodo, que pudieron costarle el partido a su equipo.
Si Durant, Harden y Westbrook fueron los grandes protagonistas de los Thunder, el escolta Daequan Cook, un gran desconocido en lo que va de eliminatoria, anotó nada menos que ocho puntos en los dos minutos que jugó durante la primera parte.
Cook anotó 3 de 3 tiros de campo, incluidos dos triples, que hizo posible que los Thunder llegasen a tener hasta 14 puntos de ventaja (36-50) antes de que concluyese la primera parte (44-52).
El ala-pívot internacional con España, Serge Ibaka, fue el cuarto máximo encestador de los Thunder al conseguir nueve puntos en los 20 minutos que jugó.
Ibaka anotó 4 de 6 tiros de campo y 1 de 2 desde la línea de personal, capturó cinco rebotes y puso dos tapones, que también ayudaron a los Thunder a hacerse con el tercer triunfo consecutivo ante los Spurs, que se han hundido cuando mejor estaban jugando y habían logrado 20 victorias seguidas, incluidas 10 en la fase final.
De ser un equipo invencible, los Spurs han encontrado que el base francés Tony Parker perdió toda su regularidad encestadora y, como ya es habitual cuando eso sucede, los problemas comienzan para el equipo de San Antonio, que además ahora tiene como rival a una máquina de hacer puntos.
Los Thunder concluyeron el partido con un 50 por ciento de acierto en los tiros de campo (40-80), comparado al 46 (34-74) de los Spurs.
Aunque el escolta argentino Manu Ginóbili y el veterano pívot Tim Duncan respondieron con un gran partido, la irregularidad encestadora de Parker, especialmente en la primera parte, y luego en los momentos decisivos del cuarto periodo, pesó como una losa.
De ahí que los 34 puntos (11-21, 5-10, 7-8), siete asistencias, seis rebotes y dos recuperaciones de balón que aportó Ginóbili no fueron suficientes para evitar la derrota que pone a los Spurs al borde de la eliminación.
“Hemos perdido los dos últimos partidos que pudimos ganar, ahora sólo nos queda conseguir la victoria en el sexto si queremos seguir adelante en la competición”, declaró Ginóbili, que con cuatro segundos para el final falló un intento de triple que pudo forzar la prórroga cuando el marcador señalaba el parcial de 103-106.
Duncan, que hizo una gran labor bajo los aros, donde los Spurs dominaron, consiguió un doble-doble de 18 puntos, 12 rebotes, tres asistencias y un tapón. Mientras que Parker llegó a los 20 puntos, pero falló nueve de 14 tiros de campo, algunos decisivos como el último cuando faltaba un minuto y 21 segundos, que fue aprovechado por Harden para sentenciar el marcador con el triple de la noche.