Tigres sigue enfermo de campeonitis y sólo tramitó un 1-1 contra Morelia, una jornada después de la bronca entre aficionados en el Luis ‘Pirata’ Fuente, aunque aún están fuera de los puestos de Liguilla.

En el marco de la muerte de Carlos Miloc, el conjunto de la UANL había arrancado el partido agresivo, pronto la escuadra visitante comenzó a tomar el control del juego; sin embargo, todas sus oportunidades se iban desviadas de la portería.

Fue hasta el minuto 30 que Monarcas se fue arriba en el marcador cuando el árbitro señaló un penalti, el cual cobró Raúl Ruidíaz.

A partir de ese momento el partido se concentró en media cancha, con pocas oportunidades de gol hasta que el árbitro mandó al descanso.

Ya para la segunda mitad, ambos equipos continuaron el partido en la media cancha; sin embargo, poco a poco los de la UANL encontraban espacios para salir a atacar al rival, pero no encontraron el tanto hasta el 70′.

Fue André-Pierre Gignac quien le dio el empate a su equipo cuando recibió un centro en el área chica y remató de cabeza para mandar guardar el balón.

El equipo local había salido a buscar el tanto del triunfo, el cual había conseguido al 80′, pero el silbante lo anuló por fuera de lugar.

En los últimos minutos de juego, Tigres se mantuvo encima de los visitantes, prácticamente no los dejaban respirar, pero no lograban culminar las jugadas de peligro que tenían dentro del área.

Con este resultado, el equipo de Ricardo Ferretti se encuentra en el lugar 13 de la tabla, mientras que Monarcas saltó hasta el décimo puesto, aunque sigue siendo último de la porcentual.