La India vive los días más difíciles desde el inicio de la pandemia de coronavirus. La segunda ola ha pegado fuerte y el aumento de contagios y muertes se cuentan por miles en las últimas horas.

Debido a lo anterior, los hospitales se han saturado y los servicios funerarios están desbordados, por lo que la gente ha tomado medidas radicales y han empezado a incinerar a sus seres queridos fallecido en plena vía pública.

Improvisando hornos fúnebres con palos, tabiques y barro, los habitantes han tomado calles, terrenos baldíos y hasta estacionamientos en centros comerciales y parques públicos para poder cremar a los muertos de forma masiva.

Las imágenes del horror le han dado la vuelta al mundo y la desesperación de la población aumenta, ante la poca ayuda de las autoridades.

Según la agencia AFP, que entrevistó al dueño de una empresa funeraria, se han trabajando hasta en 120 personas fallecidas por día, por lo que tanto la operatividad, como el número de empleados y de materia prima como madera o acero para ataúdes y urnas, está reducido.

Estatus de la pandemia en la India

El número de casos nuevos en los últimos días han superado los 350 mil cada 24 horas, mientras que en el caso de los decesos, arriba de 3200 diarios son suficientes para dejar las cifras más devastadoras desde el arranque de la pandemia.

En total, van poco más de 17.6 millones de casos registrados y 200 mil 389 muertes. Aunque diversas organización y medios de comunicación cuestionan la veracidad de las cifras oficiales del gobierno.