Tigres, se mantiene como el verdugo de Chivas. Los fantasmas de la más reciente final parecen haber nublado la mente de los rojiblancos, quienes no tuvieron capacidad de reacción y se vieron superados por los regiomontanos, quienes aseguraron la victoria por 4-0, aun sin su goleador principal, André-Pierre Gignac.

El resurgimiento del Guadalajara se vio interrumpido por Tigres, conjunto que se adueñó de la otra casa del Rebaño: Estadio Jalisco; la efectividad de los felinos se hizo presente desde su primer disparo a gol gracias al certero disparo de Nicolás Ibáñez, pero también en parte a consecuencia de los errores defensivos de los rojiblancos.

Pero la pólvora goleadora de ‘Nico’ se encendió y marcó doblete al regreso del descanso, anotación que impulsó al resto de sus compañeros para festejar en todas las ocasiones que tuvieron oportunidad, ya que para el 86’, Diego Lainez aportó con otra anotación al marcador final.

Y aunque el resultado ya estaba en la bolsa de Robert Dante Siboldi, Marcelo Flores acrecentó la felicidad de los aficionados universitarios y puso el último clavo en el ataúd del Guadalajara, su primer tanto en la Liga MX.

Las nulas llegadas por parte de Chivas no tuvieron efecto; entre las más significativas estuvieron las hechas por Ricardo Marín, Yael Padilla e Isaac Brizuela, aunque ninguna de ellas cumplió con su cometido, y ahora los rojiblancos deberán digerir una nueva y dolorosa derrota ante Tigres.