A pesar de solo tener una temporada como titular en el arco albiverde, Carlos Acevedo es el capitán de Santos y ahora tiene en puerta su primer título en Primera División. El camino no ha sido fácil para el guardameta, quien sufrió durante su estancia en las fuerzas básicas del club, de donde fue despedido en dos ocasiones y en una de ellas lo defendió un histórico del club como Oswaldo Sánchez.

San Oswaldo fue arquero los Guerreros de 2007 al 2014, cuando se retiró como profesional; a él le tocó vivir la segunda ocasión de cuando el club dio de baja al joven guardameta de entonces 17 años, quien buscaba alcanzar su sueño como profesional y seguir su desarrollo en la Sub-20, oportunidad que tuvo meses después, pero antes tuvo que derramar lágrimas y encontró tranquilidad en su colega del primer equipo.

“A Acevedo lo conozco perfecto, es un tipo estudioso, primero en lo académico, propositivo y entusiasta en lo deportivo, que siempre tenía una gran avidez de aprender, así lo recuerdo. Sucedió que lo dieron de baja en una ocasión, en las fuerzas básicas de Santos prefirieron a otros porteros y recuerdo perfectamente que les dije a los entrenadores que se equivocaban, que veía un potencial importante.

“Resulta que platiqué con Carlos, esa vez me esperó en el entrenamiento, esa vez estaba llorando porque lo habían dado de baja y le comente que no se preocupara, que terminando el entrenamiento platicábamos y hablé con él, le dije que no desfalleciera, que se tranquilizara y buscara estar en activo, que el futbol era justo y si él seguía luchando, tarde que temprano iba a conseguir su objetivo”.

Así se dio el regreso e Acevedo a Santos

Seis meses después de que los albiverdes lo echaron por segunda ocasión por su estatura, lo llamaron de nuevo por un accidente que tuvo el camión de la Sub-17 en carretera cuando regresaban de la Ciudad de México. Con los porteros inhabilitados, Carlos volvió debido a que todavía tenía su registro en la Federación Mexicana de Futbol.

“Después hubo un accidente en la Sub-17 de Santos donde fallecieron algunas personas y uno de los porteros, Santiago (Rodríguez), se lastimó la espalda y ahí es cuando le hablan de regreso a Carlos, que volviera a las fuerzas básicas y él volvió con gran ahínco, con una determinación brutal y a sabiendas que era su última oportunidad, cada entrenamiento Carlos se mataba, soñaba, buscaba, añoraba y este es el resultado del esfuerzo, nadie la ha regalado nada”, añadió. Acevedo es oriundo de Torreón, Coahuila, siempre se ha identificado con los colores del club, tanto como balonero en la Final del Clausura 2008 ante Cruz Azul, como su postal con Oswaldo Sánchez cuando construían lo que hoy es el TSM.