La victoria que consiguió San Luis ante los Jaguares de Chiapas, fue un tanque de oxígeno para los Reales que se alejaron a seis puntos de los Gallos Blancos del Querétaro, cuando restan 15 por disputarse, lo que complica la permanencia de los emplumados en la Primera División.
Y es que pocos cuadros lograron levantarse después de estar en el sótano de la tabla porcentual tras 12 jornadas disputadas. Desde que se instauraron los torneos cortos, sólo cuatro equipos alcanzaron la hombrada en 16 campañas que definen la permanencia.
El primero fue Pachuca que apareció en el fondo en el Verano 1999, pero cosechó los puntos necesarios para levantarse y enviar al Puebla al sótano tras concluir el certamen. En el Verano 2001, León superó al final al Atlante; en el Verano 2002, Celaya se logró reponer y los Esmeraldas descendieron; mientras que en el Clausura 2009, Indios adelantó a los Rayos del Necaxa.
No es la primera ocasión que Querétaro aparece en el fondo tras finalizar la fecha 12. En el Clausura 2007, tenía un porcentaje de 1.0689, por abajo de Santos Laguna (1.0824) y San Luis (1.1904). Su situación no cambió porque perdió con América, Reales y Atlas, pese a que le ganó a Morelia y Tigres. Los triunfos no le alcanzaron y perdió la categoría.
Matemáticamente, ni los Gallos, ni San Luis ni el Atlas están a salvo. Los cinco partidos que restan serán claves para los tres equipos, que tendrán que dejar la presión a un lado para alcanzar el objetivo de permanecer en el máximo circuito.