Rubén Omar Romano externó su molestia por el arbitraje, pues considera que el Puebla tenía el partido en la bolsa y el silbante Jorge Pérez Durán los perjudicó con la acción del último minuto que Alfredo Talavera transformó en el 1-1 para Toluca.
“El resultado no lo tuvimos porque hay un error arbitral, las manos deben tener intención para marcar un penalti. A mi punto de vista, intentó compensar el error anterior. (Los Diablos Rojos) tienen un plantel superior, pero tuvimos para matar un par de veces”, señaló.
Insistió que habían dado todo físicamente para culminar el juego con la victoria y la decisión del nazareno les costó dos puntos.
“El equipo hizo un esfuerzo importante, no teníamos más piernas para buscar el gol, pero estaba cerrado el partido y el rival no tenía opciones. Creo que cuando un rival barre y de rebote le da en la mano no es penal”, indicó.
Sobre el desempeño de su escuadra, resaltó que vio mejoría en las líneas.
“Tuvo más orden, los defensas atentos, después en los primeros 15 minutos estuvieron desubicados, pero el árbitro no marcó una expulsión en un falta sobre (Carlos) Sánchez, ahí habríamos tenido un hombre más y controlado el juego”, mencionó.