Desde que El Piojo viste de amarillo, el dominio del América sobre Pumas es avasallante. Cinco partidos, todos para los dirigidos por Miguel Herrera.
Sin embargo, el estratega azulcrema no tiene empacho. No se cansa de vencer a los auriazules y esta noche va por el sexto éxito frente a los universitarios, desde su arribo al Nido de Coapa, en el Torneo Clausura 2012.
Conservar la marca perfecta de los millonetas contra los felinos lleva un doble propósito, prolongar la racha invicta en el Apertura 2013 y apresurar la obtención del boleto para la Liguilla, a decir del ambicioso y polémico estratega emplumado.
“Sí, esa es la idea, sumar los puntos que nos den la posibilidad de llegar lo antes posible a la Liguilla y estar ya pensando en refrendar el título”, asegura un satisfecho Miguel Herrera, quien convencido pondera la jettatura ejercida sobre los auriazules en ambos escenarios (CU y Azteca), porque con ello ha logrado mantener muy alto la dignidad de sus fanáticos.
“Tenemos a la afición con el orgullo en lo más alto, que está contenta con los resultados, sobre todo, en los partidos de exigencia, que son Chivas, Pumas y Cruz Azul. Obviamente, la gente está contenta, porque hemos sacado buenos dividendos”, presume Miguel Herrera.
La meta, después de todo, es conservar la marca perfecta sobre los Pumas, además de que en CU será la tercera visita del Piojo. Las dos anteriores, en el Apertura 2012, y en cuartos de final del torneo pasado, se las llevaron por 0-1: “Así es, esa es la idea, ganar el partido, y por supuesto, mantenernos en primer lugar de la tabla”.