Debido a la intensidad de la lluvia que cae sobre el área metropolitana de Monterrey y a la tormenta eléctrica que registra el cielo de Guadalupe, el silbante Oscar Macías Romo determinó detener el encuentro entre Rayados y Santos, cuando el cronómetro registraba 12’ de tiempo corrido.
La cancha del estadio del BBVA Bancomer presentaba varios encharcamientos desde el iniciod del juego, principalmente por las bandas, en donde el balón no rueda adecuadamente.
El cuerpo arbitral habló con los técnicos de ambos equipos y se determinó que los equipos ingresaran a los vestidores para esperar que se calme la tormenta que cae como diluvio sobre el Gigante de Acero, de otra forma se reprogramará el encuentro.
Incluso, los directivos del estadio impidieron que saliera la afición, debido a las fuertes corrientes afuera que incluso inundaron las calles aledañas.