La misión del Monterrey frente a Atlante era ganar y lograr un mejor funcionamiento entre sus líneas, pero no se lograron ninguno de los dos objetivos. Los Potros de Hierro se plantaron en el Tec con la intención de lograr el triunfo y terminaron por llevarse un merecido empate 1-1 ante unos Rayados que siguen sin carburar en el torneo.
En un duelo con tintes de morbo por contar con Víctor Manuel Vucetich y Ricardo Antonio La Volpe en las bancas de Monterrey y Atlante respectivamente, luego de las declaraciones previas de ambos, quienes tratan de adjudicarse los éxitos del equipo albiazul de los últimos años, se desarrolló un juego trabado de errores y que deja a la vista que Aldo de Nigris y Humberto Suazo siguen estando lejos de su mejor capacidad goleadora, al no poder definir oportunidades claras que ambos tuvieron.
Los destellos del talento y la calidad que poseen los jugadores del Monterrey se dieron a cuentagotas, pero en la primera mitad durante la mejor jugada colectiva que tejieron los albiazules cayó el gol que les dio la ventaja parcial.
Severo Meza inició la jugada por el costado derecho, dejó para Aldo que de un taconazo cedió a Neri Cardozo, el argentino devolvió a Meza quien antes de llegar a la línea de fondo, mandó una diagonal buscando a Humberto Suazo, pero Guagua trató de anticiparse para despejar y terminó mandando la esférica al fondo de su propia portería para el 1-0 a favor de los regiomontanos al 22′.
Atlante no se salió del guión con el que llegó al Tec y continúo siendo el dueño de la pelota, paseando de lado a lado del campo el balón tratando de fabricar una jugada por medio de su movilidad y dinámica al frente, metiendo en serios problemas a la zaga rayada y haciendo que el conjunto de Vucetich replegara líneas.
Al 30′ Israel Martínez sacó un disparo de media distancia que José María Basanta desvío en el trayecto a su guardameta, sin embargo Orozco reaccionó de manera impresionante y estiró su pierna derecha para evitar el tanto de la igualada atlantista.
Enseguida fue Esteban Paredes quien exigió al portero de la Pandilla, al sacar un potente disparo de derecha, que Jonathan también rechazó al aguantar a pie firme el fogonazo del chileno, alejando el peligro de su meta.
Antes de cerrar el primer episodio del encuentro, ‘el Chupete’ tuvo la posibilidad de ampliar la ventaja para los de casa, pero el andino demostró que todavía esta lejos de su mejor nivel goleador, al fallar al momento de querer definir, luego de que Ayoví le devolvío una pelota que parecía más a modo para que el ecuatoriano disparara a la puerta, pero Suazo tampoco supo concretar con certeza.
Durante la segunda mitad el Monterrey niveló un poco el tiempo de posesión del balón, pero sin tener profundidad en sus avances y el partido cayóp en una serie de errores, imprecisiones y pelotas perdidas en el medio campo por parte de ambos conjuntos.
Los Potros de Hierro se negaban a irse con las manos vacías de la Sultana del Norte y empujó para ir al frente teniendo a Esteban Paredes como su hombre más peligroso, acompañado por Maidana y ‘Kikín’ Fonseca, quienes se movían por ambos lados para tratar de surtir de balones y jalar la marca y que Paredes quedara con mayor libertad.
Fueron pocas las ocasiones en que Rayados logró llegar con claridad sobre el arco defendido por Villalpando, y cuando logró penetrar la zaga azulgrana, también carecieron de capacidad de definición, como al 56′ cuando Neri Cardozo punteó una pelota que le dejó De Nigris, pero su envío fue desviado y se estrelló en el palo derecho de la portería.
Aldo tampoco logró firmar el segundo gol de los albiazules, cuando el recén ingresado Jesús Corona envío un servicio medido por derecha, pero el ariete no pudo conectar ni con la pierna ni de cabeza en el corazón del área, cuando se encontraba solo frente al arquero.
La incertidumbre que se vive en el accionar del conjunto de Víctor Manuel Vucetich abrió una incógnita más cuando el timonel ordenó la salida de Suazo para dejar su lugar a Miguel Morales y el chileno en lugar de dirigirse hacia la banca, prefirió retirarse corriendo rumbo al vestidor.
Al 79′ Aldo de Nigris falló la oportunidad más clara que tuvo en el cotejo, cuando robó una pelota en la salida de Atlante y al ingresar al área, tuvo a su merced al portero Villalpando para definir y sacó un cañonazo que se fue muy arriba del travesaño, desperdiciando la oportunidad de definir el encuentro a favor del Monterrey.
En el pecado los regios llevaron la penitencia, además de que Atlante encontró la recompensa a su esfuerzo, a pesar de tener un hombre menos desde el 74′ debido a la expulsión de Gerardo Vanegas por una plancha sobre Eduardo Zavala, ya que al 83′ se produjo un penal a favor de los azulgrana por una falta de Mier sobre Paredes.
Osvaldo Martínez se encargó de cobrar de manera correcta la pena máxima para el empate definitivo 1-1 al 84′ y que le otorgó un merecido punto a los de Cancún, que llegaron a proponer el encuentro y a plantarse con autoridad al Tecnológico.
Rayados con más corazón y voluntad que futbol, se fue al frente buscando el triunfo, pero la falta de puntería de Aldo de Nigris, Eduardo Zavala y la fortuna que pareció estar acompañando a Villalpando bajo los tres palos, que se convirtieron en aliados de Atlante en este juego, impidieron que la pelota entrara al marco y en dos ocasiones los mismos postes salvaron a los pupilos de Ricardo La Volpe.
Con el silbatazo final de Francisco Chacón llegó un fuerte abucheo por gran parte de la afición, que sigue sin ver al equipo al que se ha acostumbrado en los últimos tres años, como evidente signo de inconformidad y desilusión, solamente La Adicción, barra albiazul que se ubica en la zona de General, se mantuvo apoyando a su equipo.