La UdeG regresó al Estadio Jalisco en la Primera División para perder su segundo partido del torneo 1-0 ante Gallos Blancos, su condición de invicto que guardaba desde agosto de 2013 y de paso prender las luces rojas en el tema físico, pues el equipo se pierde en los segundos tiempos.

El primer tiempo del regreso de los Leones Negros en la Primera División en la cancha del Estadio Jalisco, fue muy poco atractivo para la afición que asistió a este histórico partido, pues apenas un par de llegadas en ambas porterías, aunque sí mucho ímpetu de parte de los universitarios, quienes mostraron las ganas de salir con los tres primeros puntos del torneo en su casa, en donde por cierto no perdían desde agosto de 2013.

Al ‘5 llegó la primera de peligro para los Leones Negros, después de un tiro de esquina en el que el arquero visitante, Edgar Hernández soltó el balón, entonces Héctor Reynoso con la parte externa de su pie derecho buscó encontrarse con el esférico, pero este salió apenas desviado del arco queretano.

Para el ’24 llegó la respuesta de Gallos Blancos, en un cabezazo de Ángel Sepúlveda, quien giró su cabeza para dirigir el balón a segundo poste, pero la pelota se estrelló en la base del palo izquierdo del arco de Humberto Hernández, para fortuna del portero universitario.

El juego transcurrió por la misma tónica, Leones Negros proponiendo el partido y siendo dueño de la pelota, mientras que Gallos Blancos jugó a la contra, buscando un descuido de los melenudos, pero el empate sin goles predominó en los primeros 45 minutos que no fueron del agrado de los asistentes.

En la segunda mitad llegó el gol, pues al 59′ Gallos Blancos aprovechó un descuido en la zaga universitaria, que se combinó con una gran jugada de Camilo Sanvezzo, quien se perfiló dentro del área de frente al Gansito Hernández y lo venció a su salida para el 1-0 de los visitantes.

Al 72’ Héctor Reynoso fue exhibido por William da Silva, quien le picó la pelota y lo dejó viéndole la espalda, a bote pronto sacó un gran disparo de zurda que apenas desvió Humberto Hernández, quien evitó el 2-0.

Un minuto más tarde, en la contra de los Leones Negros, Fidel Martínez se metió al área, se quitó al arquero y ya cuando se disponía a sacar el disparo, Miguel Martínez lo derribó, pero el asistente Salvador Rodríguez Gorromino decidió no marcar un penalti que para todo el estadio fue clarísimo, lo que provocó el enojo de la fanaticada y toda la banca de los Leones Negros, quienes vieron de frente la jugada.

La segunda derrota de los Leones Negros en el torneo comienza a pesar, pues al equipo aunque se le ven ganas, parece fundirse físicamente en los segundos tiempos y eso les ha costado perder los dos primeros partidos en el torneo, una situación que apremia por el tema del descenso.