Pérdidas por más de 600 millones de pesos, ruptura con la afición y un gusto que ya se esfumó, son las claves por las cuales Ricardo Salinas Pliego ha decidido poner en venta al Atlas, equipo del cual ha sido propietario por más de cinco años.
Fuentes cercanas al actual dueño de los rojinegros aseguran que son tres los grupos interesados en adquirir a los Zorros, dos de ellos tapatíos y con experiencia en el futbol mexicano, y uno más de la Ciudad de México.
Las cifras en las que es tasado el Atlas aún no se hacen oficiales, y es que algunos de los compradores están interesados sólo en la plantilla, mientras que otros buscan también los terrenos del Centro de Capacitación de Futbol (Cecaf), semillero de Fuerzas Básicas, y La Madriguera, actual casa del equipo.
En 2013 fue cuando el empresario capitalino, dueño de Grupo Salinas, adquirió a los rojinegros del Atlas en una operación que rondó los 500 millones de pesos, quitándoles el poder a los 126 socios que tomaban las decisiones en Colomos y que tenían al equipo al borde del descenso, algo que supuestamente vinieron a arreglar los nuevos dueños, pero que terminan dejando al equipo prácticamente en la misma situación en la Liga.
En esa histórica compra, Salinas Pliego sólo se hizo acreedor de las plantillas de futbol en todas sus divisiones, el escudo y colores del FC (equipo de juego), además de las instalaciones de Cecaf.
Hoy, el Atlas, con un promedio de 29 mil 586 aficionados por partido, sigue siendo uno de los equipos que más gente lleva a su estadio, sólo por debajo de Monterrey, Tigres y de Chivas, con los que tiene números muy cercanos en cuanto espectadores que acuden a su casa.