Siguiendo con la línea del director deportivo de La Máquina, Ricardo Peláez, de contratar futbolistas probados en la Liga MX, aunado a la necesidad de encontrar un ‘killer’, el paraguayo Carlos González es objeto de deseo de Cruz Azul para el siguiente torneo.
Fuentes consultadas por este diario aseguraron que el seleccionado guaraní es la primera de varias opciones que tiene el conjunto celeste para reforzar la delantera, debido a que su calidad está más que probada en el balompié mexicano, con su paso en Necaxa y actualmente, con Pumas.
La misma fuente reveló que ante el acercamiento de la directiva cementera para conocer las condiciones del traspaso, el presidente del cuadro universitario, Rodrigo Ares de Parga, fijó la salida del ariete sudamericano en 12 millones de dólares.
A pesar de que Milton Caraglio ha resurgido futbolísticamente en las últimas fechas, tanto Ricardo Peláez como Pedro Caixinha están convencidos de que el cuadro cruzazulino necesita otro artillero de calidad probada para acercarse al objetivo de la novena, por lo que la juventud y olfato goleador de González lucen como el complemento ideal para la plantilla celeste.
Se sabe que ante el interés por el jugador felino, el uruguayo Martín Cauteruccio es el elegido para abandonar al conjunto de La Noria, sin importar que hace poco renovó su vínculo con Cruz Azul hasta 2020.
Si bien es cierto que durante el Apertura 2018 se destapó como el goleador del equipo, Caute no ha podido afianzarse como la referencia en el ataque cruzazulino, además de que el naciente interés de equipos como San Lorenzo de Almagro, por repatriarlo, le permitiría a La Máquina hacer caja con su traspaso y buscar al delantero que tanto desea.
En caso de que González se vista de azul durante el verano, Ricardo Peláez mantendría intacta su ideología de adquirir futbolistas con un recorrido exitoso en el balompié mexicano, tal y como lo hizo desde su llegada al conjunto cementero con los refuerzos de Pablo Aguilar, Igor Lichnosvsky, Roberto Alvarado, Orbelín Pineda y Milton Caraglio que hoy son elementos indiscutibles en el cuadro del estratega Pedro Caixinha.