Un empate un sabor a victoria. El debut de Jaime Lozano siendo el entrenador oficial de la Selección dejó sensaciones y algunas actuaciones agradables, sin embargo, no pudieron terminar con la larguísima racha de 53 años sin derrotar a Australia (2-2).

Los de Oceanía se aprovecharon de una de las debilidades más notorias del Tri, jugadas a balón parado y en un centro que pudo haber sido cortado por Ochoa, Harry Souttar se anticipó a la floja marca de Johan Vásquez y remató cruzado al 15′ para abrir el marcador.

El conjunto Azteca tuvo el empate desde el manchón penal, pero Santi Giménez confirmó que lo suyo no es pararse en el punto penal y reventó el poste para que en la siguiente jugada Martin Boyle nos mostrara cómo se ejecuta una pena máxima e incrementó la ventaja para los australianos.

Y como los penales estaban a la orden, Lozano decidió mandar al especialista atinando a su apuesta, ya que apenas unos minutos después se marcó otra falta dentro del área en favor del Tri y ya con Raúl Jiménez fue un trámite el gol nacional al 70′.

Quedaban 20 minutos en el cronómetro y México ya estaba encima, y quedó reflejado cuando el debutante Chino Huerta estuvo a nada de romper la red con un zapatazo de aire aprovechando un error infantil de la zaga rival y así poner el definitivo 2-2.