Su pasión es el deporte, simple y sencillamente le gusta estar realizando algún tipo de actividad, mantenerse sano, en forma y alejado de los vicios, así es la vida de Raymundo Contreras que en sus buenos tiempos como dice él, fue Campeón Nacional de Halterofilia.
En su tiempo de juventud ya quedó atrás y hoy se dedica al ciclismo, un deporte que le apasiona en lo particular, uno que fomenta día a día y que trata de impulsar a las nuevas generaciones, dice él que el ciclismo es una forma de mantenerse sano y lejos de los vicios, además de ayudar a cuidar el medio ambiente.
El escenario de la entrevista es el campo dos de la Unidad Deportiva “Revolución Verde” en donde luego de terminar de arbitrar un partido de fútbol, sede algunos minutos de su tiempo para EXTREMO DEPORTIVO.
Raymundo siempre suele ser muy cortés, educado y mesurado al hablar, pero cuando la charla es de deporte, en especial del ciclismo o la halterofilia, la emoción se nota a flor de piel.
“Yo inicie en esto del ciclismo desde pequeño, aunque competí hasta que ya era bastante mayor, a mi siempre me ha gustado andar en bicicleta, es algo que disfruto mucho”.
“Cuando yo vivía en Ocampo que era cuando tenía como 9 ó 10 años de edad, fue cuando comencé a andar en bicicleta, hacia mandados de mi casa, a veces iba desde el ejido, donde nosotros vivíamos hasta el mero Ocampo, era una larga distancia pero lo disfrutaba”, indica.
Sin embargo no fue el ciclismo lo que le alentó a meterse de lleno al deporte, sino la halterofilia y el físico-constructivismo, “a mi me llamo la atención el físico-constructivismo, el ver a la gente hacer ejercicio de tal manera que cuidaban su salud y daban un buen aspecto de su cuerpo fue lo que me llamó mucho la atención cuando estaba pequeño”.
“Yo sin saber cuando era pequeño inicie con la halterofilia, claro de manera muy amateur si lo podemos llamar así, comencé con pesas hechas por mi y mi papá, poníamos tubos o barras de acero y en los lados dos botes llenos de cemento y esas eran nuestras pesas”, comenta.
Indica que eso fue a la edad de 10 años donde sin duda alguna comenzó a hacer fuerza y a gustarle ese deporte, el cual el no conocía, “yo hacía ejercicio porque me sentía bien, recuerdo bien que cuando yo tenía 10 años de edad, a mi padre le regalaron unas pesas hechas de pura madera de ébano, entonces eran piezas muy pesadas, yo intentaba levantarlas pero no podía, fue hasta cuando tuve 12 años que las logre levantar y poder trabajar con ellas”.
Dijo que leía revistas especializadas en físico-constructivismo en donde venían algunos tipos de rutinas las cual practicaba para seguir manteniéndose en forma.
Posteriormente en el año de 1967 él y su familia emigraron a Tampico donde se hizo oficialmente levantador de pesas, “en Tampico ya había gimnasios especializados para levantar pesas, entonces ahí me prepare, dure dos años entrenando fuerte y mi primer participación nacional fue en 1970 en Jalapa, Veracruz en un campeonato juvenil, el que obtuve el séptimo lugar.
“Después de ese torneo me seguí preparando fuerte y en ese mismo año hubo otro campeonato nacional en Puebla y gané el segundo lugar, y así estuve preparándome fuerte hasta que en 1974 gane mi primer campeonato nacional, fu en la ciudad de Guadalajara, Jalisco en la categoría de Segunda Fuerza”, señala.
La preparación de Raymundo Contreras siguió y en su primer evento en la categoría de Primera Fuerza logró el segundo lugar nacional en Guanajuato, lo que le valió para formar parte de la Selección Nacional de Halterofilia.
En 1975 participó en torneos de carácter internacional dentro y fuera de México como en campeonatos mundiales en Estados Unidos, Guatemala, Honduras, Cuba.
Y en 1977 conquistó su primer campeonato Centroamericano mismo que ganó en Cuba y en 1978 participó en los Juegos Panamericanos en donde quedó en segundo lugar.
El retiro de Raymundo llegó en 1982, y se fue por la puerta grande al ganar en Madero, Tamaulipas su tercer campeonato nacional, después de ahí decidió dejar dicho deporte como competidor.
“Después de mi retiró en el 82 me dedique a formar a atletas, algunos de mis alumnos fueron Jorge Rosales, Francisco Reyes Picasso, que lograron campeonatos nacionales, estatales y ganaron en varias ocasiones los Campeonatos Estudiantiles Universitarios.
“Yo trabaje para la UAT de 1980 a 1990, trabajaba para la facultad de Agronomía con el equipo de levantamiento de pesas, después construyeron el gimnasio Multidisciplinario y pedí trabajo ahí pero al parecer mi currículum no fue lo bastante bueno y no me aceptaron”.
En el año 2003, fue entronizado al salón de los inmortales de Tamaulipas; se le reconoció su esfuerzo y dedicación al deporte por representar el nombre de su Estado y ponerlo en lo más alto.
Tras su retiro en Levantamiento de Pesas Raymundo Contreras se dedicó al ciclismo, deporte en el que ha figurado, ha ganado centenares de premios en Tamaulipas y ha competido en cuatro torneos nacionales de la categoría Veteranos.
Además por si fuera poco entrena todos los días cerca de 2 horas haciendo diversos recorridos, desde Ciudad Victoria hasta Villa de Casas, Llera, Jaumave y diversos puntos.
Actualmente también se desempeña como árbitro de fútbol, compromisos a va en bicicleta a trabajarlos, cuando son foráneos.
“La mayor parte de los automovilistas no respeta a los ciclistas y es algo en lo que tenemos que hacer mayor conciencia pues somos al final un vehículo que también merece respeto”.