El Super Bowl LIX pasará a la historia por el gran dominio defensivo que impuso Philadelphia sobre Kansas City. Los Chiefs se mostraron inoperantes ante un equipo que defensivamente se los comió; tanto en las trincheras como en las oberturas hombre a hombre.

Uno de los que más sufrió en este partido, fue el ala cerrada de Kansas City, Travis Kelce. El número 87 topó con pared cuando se enfrentaba a algún defensivo, ya que lo limitaron a solo 39 yardas totales en todo el encuentro.

En conferencia después del Súper Tazón, Kelcemencionó los puntos débiles de su equipo. Con un semblante triste y abatido, uno de los mejores en su posición habló sobre la contundente derrota.

“No pudimos ponernos en marcha en el ataque, simplemente nos ganaron en las tres fases y, además de eso tuvimos pérdidas de balón, penalizaciones, y no podíamos conseguir primeros y diez”, mencionó Kelce.

Además, añadió que fue el peor partido de los Jefes en todo el año. “No habíamos jugado tan mal en todo el año. No se pierde así sin que todo salga mal”, culminó sobre ese tema Travis Kelce.

Fueron resilientes
A pesar de la derrota, Travis Kelce considera que el equipo fue resiliente y nunca bajó los brazos; aún con la significativa diferencia en el marcador y en el terreno de juego.

“Este equipo va a luchar hasta el final para siempre y eso lo viste”, dijo. “Incluso con el marcador tan amplio, siempre íbamos a luchar”, culminó un devastado Travis Kelce por la derrota.