Nadie al finalizar la campaña 2019, cuando Tom Brady decidió apartarse de Nueva Inglaterra hubiese podido pronosticar que el próximo domingo el jugador estaría a las puertas de hacer suyo el que quizá es el récord más representativo para un quarterback, el de más yardas por pase y nada menos que ante el equipo con el que creó un lazo imposible de romper.

Suena inverosímil creer que tras 19 encuentros con Tampa Bay y tras 5 mil 720 yardas generadas con los Buccaneers, Brady llegue al encuentro contra Patriots a 68 yardas de distancia de romper la marca que 80 mil 358 que le pertenece a Drew Brees.

No rompió el récord antes, no lo hará después de este fin de semana, lo hará justamente en su regreso a Gillette Stadium, ante la franquicia con la que jugó 20 años, ante Bill Belichick.

‘The Goat’ podría hacerse de la marca en su primera serie ofensiva, es más, hasta en un solo un envío de anotación. A lo largo de toda su carrera Brady tiene 13 pases de touchdown de más de 68 yardas, todos los hizo jugando con Patriots.

Será interesante saber cómo es que la organización maneja este momento. Hay que recordar que cuando Brees estableció la marca, el juego se detuvo para hacer una breve ceremonia. Claro, eso ocurrió con Drew jugando en casa. Antes, cuando Peyton Manning superó la marca de Brett Favre, también hubo una pausa para que la afición lo aclamara, pero de la misma manera, estaba jugando en su propio estadio.

La prensa en Boston ya preguntó a la organización qué pasará cuando Brady sea el nuevo líder histórico, pero hasta el momento no han dicho nada.

El pasado domingo los ‘Bucs’ perdieron el invicto frente a los Rams y al finalizar el encuentro se le cuestionó a Brady sobre lo que puede pasar este próximo fin de semana, pero no respondió más allá de su deseo por ganar el encuentro.

“Es una derrota dolorosa, pero en el camino de regreso evaluaré lo que tengo que hacer desde mi posición como quarterback para ganar el juego. Quiero ganar cada vez que salgo al campo”, indicó.