Fue un 25 de abril de 2014 cuando la noticia de la muerte de Tito Vilanova sacudió al Futbol Club Barcelona y a todos sus aficionados, quienes un año antes habían festejado el título de liga número 22 del club, conseguido de la mano del entrenador catalán.

Esa tarde Tito perdió la batalla contra el cáncer de glándula que le fue diagnosticado en el año 2011. Tras ganar el Campeonato tuvo que dejar a un lado las canchas para someterse a nuevos tratamientos. Tras una recaída fue internado en el Hospital Quirón de la ciudad condal, donde falleció.

Vilanova comenzó su carrera como jugador de futbol en las fuerzas básicas del Barcelona, sin embargo, su debut en Primera División llegó cuando defendió la camiseta del Celta de Vigo en 1992.

Con el cuadro del Celta logró llegar a la Final de la Copa del Rey de la campaña 1993-1994, pero cayeron en serie de penaltis ante el Real Zaragoza.

Después de cinco años en equipos de la Segunda División española, Tito se retiró de las canchas y en el 2001 arrancó su trayectoria como entrenador en los equipos juveniles del cuadro culé, donde formó parte del cuerpo técnico de Pep Guardiola, cuando en 2007 fue elegido para hacerse cargo del banquillo.

Del 2008 al 2012, Tito Vilanova trabajó al lado de Pep, siendo parte del equipo histórico de 2009 que consiguió el “sextete”.

En 2012, luego de la salida de Guardiola y gracias al conocimiento de la mística del Barcelona, la dirigencia lo nombró entrenador del primer equipo en junio del 2012. Esa misma temporada se convirtió en Campeón de Liga con el cuadro culé.