La ventaja que tuvieron los dos autos de Mercedes Benz en la primera parte del Gran Premio de Arabia Saudita desapareció de manera sorpresiva por una bandera roja que benefició circunstancialmente a Red Bull.

La carrera inició de manera ordenada, con Lewis Hamilton y Valteri Bottas en primer y segundo lugar, sin que Max Verstappen pudiera adelantarlos en la arrancada, cuando Checo Pérez tampoco pudo rebasar a Charles Leclerc, para mantenerse en la quinta posición.

Sin embargo, en la Vuelta 10, el alemán Mick Schumacher sufrió un accidente que provocó banderas amarillas. Eso quiso ser aprovechado por Hamilton y Bottas, quienes pasaron a pits para cambiar neumáticos, mientras Verstappen se quedaba en la punta de la carrera, con la aparente desventaja de que luego tendría que parar.

Pero esa bandera amarilla se convirtió en roja porque las barreras de protección que deshizo Schumacher debían ser reparadas, de manera que todos los autos se fueron a pits, cuando Verstappen también aprovechó para que le cambiaran los neumáticos, pero ya sin perder la punta.

Durante la bandera amarilla, Checo Pérez también pasó a pits igual que los dos autos de Mercedes Benz, lo que igualmente le perjudicó, ya que cayó al octavo lugar, luego de que pilotos como Pierre Gasly no pararon a cambiar neumáticos.

Estos, como Verstappen, lo hicieron hasta que hubo bandera roja, de manera que el mexicano se encontró con una carrera más cuesta arriba al reinicio de la carrera, la penúltima de la temporada en la que Verstappen y Hamilton pelean por el campeonato de pilotos.

Desafortunadamente para Pérez, en el reinicio de la carrera quedó entre dos autos y un toque de Charles Leclerc le dejó sin la punta del bólido, lo que le obligó a abandonar el Gran Premio de Arabia Saudita.