Los Spurs de San Antonio aprovecharon una lesión inesperada de LeBron James y se impusieron 110-95 en el primer juego de la Final de la NBA contra el Heat de Miami.
Tim Duncan aportó 21 puntos y Tony Parker 19 para el triunfo de los locales en el AT&T Center.
En un juego en el que ninguno de los dos equipos sacó una ventaja de dos digitos hasta el final del partido, San Antonio se puso arriba en el marcador durante el primer cuarto, sin embargo, Miami siempre se mantuvo cerca durante el segundo periodo y se fueron al descanso con un 54-49 para los Spurs.
Finalmente, en el tercer cuarto, Miami vio su esfuerzo recompensado y se puso arriba en el marcador tras aprovechar varias imprecisiones en pases del conjunto local.
Sin embargo, en el último capítulo, el destino sonrió a las Espuelas.
LeBron James, que lideró al Heat con 25 puntos, tuvo que dejar el encuentro por una serie de calambres. Era el mejor momento de Miami en el encuentro.
El ausente de los Spurs durante los tres primeros cuartos, Danny Green, despertó de su letargo en el último y con tres triples consecutivos logró la última voltereta del partido.
A partir de este momento, todo fue miel sobre hojuelas para los subcampeones de la NBA, que manejaron el encuentro a placer y aumentaron su ventaja para terminar imponiéndose con facilidad.
El segundo partido de la serie se jugará el próximo domingo en el AT&T Center de San Antonio.