No todos los días, Zinedine Zidane desayuna con Fernando Hierro en el mismo restaurante donde también se puede observar a Cafú, justo en el mismo hotel donde se hospeda el presidente de la Federación Mexicana de Futbol, Justino Compeán.
También poco común es observar al entrenador de la Selección de Alemania, Joachim Low, compartir la clase Turista de un vuelo de Sao Paulo a Salvador de Bahía con el timonel de Ecuador, Reinaldo Rueda.
El sorteo de la Copa del Mundo reunió a gran parte de los íconos del futbol mundial, quienes se hospedan en dos de los cinco hoteles de Costa do Sauípe, un complejo turístico que hoy podría ser el “Hollywood” futbolero.
“Es la distinción del futbol, de saber que estás en un ambiente muy bonito, con las personalidades del futbol mundial, y bueno, es la gran distinción que te ganaste después de años de buen trabajo”, consideró Rueda.
A muy pocos metros de distancia, ayer por la tarde compartían el lobby de uno de los inmuebles el entrenador de la Selección rusa, Fabio Capello, con el director de Selecciones Nacionales de México, Héctor González Iñárritu.
Esto sucedía minutos después de que Low salía con varios acompañantes y el director técnico de Honduras, Luis Fernando Suárez, ofrecía entrevistas en una fuente en el exterior del hotel.
Ya ayer, en uno de los ensayos del sorteo, el secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, contó con la ayuda de sus ocho “asistentes”: Cafú, el uruguayo Alcides Ghiggia, artífice del “Maracanazo”; Mario Alberto Kempes, el inglés Geoff Hurst y Zidane, así como con Fabio Cannavaro, Lothar Matthaeus y Fernando Hierro, quienes representarán en el evento a cada una de las ocho Selecciones campeonas del mundo.
Todos ellos participarán del sorteo este viernes, aunque previamente tanto entrenadores como directivos se reunirán esta mañana del jueves en un seminario para conocer detalles reglamentarios y técnicos de la Copa del Mundo.
El azar que implica el sorteo es uno de los ingredientes que parecen llenar de expectativa a Costa do Sauípe, en una combinación de ambiente playero y relajamiento turístico.
Hasta ayer en la noche, eran pocos los personajes que faltaban por integrarse a la comitiva mundialista, como el entrenador de la Selección de Estados Unidos, Jurgen Klinsmann, quien como avanzada tenía ya al presidente de la US Soccer, Sunil Gulati.
Entre los pocos que se han resistido para figurar como parte de esa “elite” están precisamente los representantes mexicanos, la única delegación que no contará en el sorteo con su entrenador: Miguel Herrera, y cuyo Presidente de la Federación Mexicana de Futbol, Justino Compeán, ha sido muy discreto como para no dejarse ver.