Serbia aseguró su participación en la Eurocopa 2024, marcando así su debut en el torneo como nación independiente. La Selección Balcánica selló su pase al empatar en la última jornada contra Bulgaria, en un partido donde la tensión estuvo a flor de piel. Este hito se convierte en un capítulo trascendental para un país que, anteriormente, había participado en el torneo como parte de Yugoslavia en el año 2000.
A pesar de un auspicioso inicio con el gol de Veljkovic en la primera parte, la incertidumbre se apoderó del Gradski Stadion Dubočica cuando Bulgaria igualó el marcador con el tanto de Rusev en el minuto 59.
La situación se tornó aún más compleja para los serbios al enterarse de que Montenegro, su antiguo compañero en la extinta Yugoslavia, estaba a punto de arrebatarles la ansiada clasificación en su propio enfrentamiento con Hungría.
La esperanza para Serbia residió en un giro inesperado, gracias al doblete de Szoboszlai en apenas dos minutos (67′ y 68′). Este giro fortuito no solo mantuvo viva la aspiración serbia, sino que también dejó a Montenegro sin opciones de avanzar en la competición. El gol final de Babic en los minutos finales del partido frente a Bulgaria selló la clasificación de Serbia y desató la celebración de jugadores y aficionados.
Con esta victoria, Serbia se une a la lista de equipos que competirán en la Eurocopa 2024, junto a potencias futbolísticas como Alemania, España, Francia, Portugal, entre otros. Este logro marca un momento histórico para el fútbol serbio y abre la puerta a una nueva etapa en la participación internacional del país. El sorteo que determinará los grupos se llevará a cabo el 2 de diciembre en Hamburgo, con 21 de los 24 finalistas ya confirmados. Las tres plazas restantes se decidirán en los playoffs de marzo, manteniendo la expectación hasta el último momento.