Cerca de 6 mil seguidores del Feyenoord se enfrentaron con la policía antidisturbios cerca de la Plaza de España causando daños a la fuente de la Barcaccia previo al encuentro de su equipo contra la Roma en los dieciseisavos de la Europa League.
Los uniformados utilizaron bombas de humo para controlar el disturbio mientras que los seguidores los agredían con botellas.
33 personas fueron detenidas y otras sólo recibieron una multa económica de 33 mil euros y la prohibición de asistir al partido.