La ‘ayuda divina’ del Papa Francisco surtió efecto, el club argentino, San Lorenzo venció 1-0 a Nacional de Paraguay en el Nuevo Gasómetro para coronarse Campeón de la Copa Libertadores por primera vez en su historia.
Cuando la estaba pasando mal, un gol de penalti de Néstor Ortigoza en el primer tiempo le dio la victoria 1-0 a San Lorenzo sobre Nacional de Paraguay, con lo cual el equipo argentino alcanzó ese preciado trofeo por el que sus hinchas se desvivían, a tal punto que ese logro es considerado el más importante en sus 106 años de vida.
El partido de ida en Asunción finalizó 1-1 entre dos equipos clasificados como los peores en la fase de grupos: San Lorenzo finalizó en el puesto 15 y Nacional en el 16.
Esta conquista le permitió a Argentina elevar a 23 la cantidad de títulos en la Libertadores, alejándose de Brasil (17); Uruguay (8); Paraguay (3); Colombia (2); Chile y Ecuador (1). San Lorenzo era el único club grande de su país que estaba huérfano de ese título, que por lo menos una vez atraparon Boca Juniors, River Plate, Independiente y Racing Club.
Lejos de arredrarse por un estadio convertido en caldera, Nacional le mostró uñas y dientes a su rival apenas al minuto de juego cuando un disparo de Derlis Orué, que encontró un rebote en Juan Mercier, se estrelló en un poste con el arquero Sebastián Torrico resignado a sacarla de adentro.
Rústico pero entusiasta, Nacional lució superior con un férreo bloque defensivo al que San Lorenzo no pudo quebrar pese a tener dos delanteros de punta, Martín Cauteruccio y Mauro Matos.
Sin creación ni juego colectivo, un gol de San Lorenzo parecía una quimera hasta que Ramón Coronel cometió un error infantil al bloquear con su brazo como en el voleibol un disparo intrascendente de Cauteruccio en un penal que Ortigoza envió a la red a los 36 minutos.
Ortigoza, quien defendió a Paraguay en el Mundial de Sudáfrica 2010, definió con derechazo casi rasante y el arquero Ignacio Don no la tocó, como ni siquiera la tocó en todo el primer tiempo.
Con ese gol, San Lorenzo encontró más espacios pero se salvó del empate sobre el final con un disparo de Fredy Bareiro que se fue cerca de un ángulo.