La Confederación Sudamericana de Futbol impuso el jueves una multa de 200.000 dólares al club Corinthians, pero la escuadra brasileña podrá volver a jugar de local con el apoyo de su hinchada tras cumplir la sanción de un partido a puertas cerradas en la Copa Libertadores.
Los castigos son consecuencia de la muerte de un adolescente boliviano durante el partido San José-Corinthians, en la ciudad de Oruro, por el Grupo 5, disputado en febrero. El deceso se produjo cuando el hincha fue herido en un ojo por una bengala lanzada desde las gradas ocupadas por los brasileños.
Néstor Benítez, vocero del organismo continental, conocido como Conmebol, dijo a la AP que el tribunal de disciplina dispuso, además, prohibir por 18 meses el ingreso de hinchas del Corinthians en cotejos a disputarse como visitante. San José fue multado con 10.000 dólares por no ajustar su sistema de seguridad y permitir el ingreso de la bengala fatal.