El Real Madrid inscribió su nombre en la Supercopa de baloncesto 27 años después, tras derrotar en la Final al Barcelona por 84-95, rompiendo así la gran racha del conjunto catalán en esta competición, ya que había ganado las tres últimas ediciones.
El equipo de Pablo Laso, en el que destacó Rudy Fernández con 22 puntos y 25 de valoración, fue un justo vencedor en un encuentro en el que siempre mandó en el marcador y en el juego frente a un rival que estuvo todo el tiempo a remolque y que echó mucho de menos a su gran capitán, Juan Carlos Navarro, porque uno los problemas del equipo barcelonés fue su falta de acierto en el tiro exterior en los momentos clave del encuentro, a lo que se unió una defensa poco efectiva como demuestran los 95 puntos encajados.