La NBA pospuso el próximo partido de los Lakers de Los Ángeles, previsto para este martes ante los Clippers de la misma ciudad, tras el fallecimiento del astro retirado Kobe Bryant, su hija y otras siete personas en un accidente de helicóptero ocurrido el domingo.
Mediante un comunicado, la liga anunció la decisión el lunes, y dijo que la tomó “por respeto a la organización de los Lakers”.
Los integrantes del equipo se enteraron del accidente el domingo, cuando volaban de regreso a casa desde la costa del Este. LeBron James y otros jugadores de los Lakers se mostraron apesadumbrados al descender del avión.
James emitió sus primeros comentarios públicos el lunes por la noche, mediante la red social Instagram. Publicó fotografías en las que aparece junto a Bryant.
El actual astro de los Lakers, cuatro veces nombrado el Jugador Más Valioso de la NBA y elegido en 16 ocasiones al Juego de Estrellas, dijo que estaba “destrozado y con el corazón roto”. Afirmó que había llorado en repetidas ocasiones mientras trataba de escribir sobre Bryant.
James, quien se incorporó a los Lakers la temporada anterior, refirió que había hablado con Bryant por teléfono el domingo por la mañana. Una noche antes, James rebasó a Bryant en el tercer puesto de la lista histórica de máximos anotadores de la NBA.
“No hubiera pensado, ni en un millón de años, que ésa sería la última conversación que tendríamos”, escribió James. “Les prometo que continuaré con su legado. Tú significaste mucho para todos nosotros, especialmente aquí en la #LakerNation, y es mi responsabilidad echarme a este equipo sobre las espaldas y seguir haciendo que esto funcione. Por favor, dame desde el cielo la fuerza y sígueme mirando”.