En un enfrentamiento amistoso entre el FC Barcelona y el AC Milan, celebrado en el estadio Rose Bowl de Los Ángeles, el equipo italiano se llevó la victoria en penales tras un empate 2-2 en el tiempo reglamentario.

La definición desde los once pasos terminó 4-3 a favor de los milaneses, dejando a los culés sin recompensa después de un intenso partido en el campo.

El primer tiempo fue un despliegue de acción y emociones que dejó a los aficionados al borde de sus asientos. Desde el pitido inicial, ambos equipos mostraron su intención de imponer su juego, y el marcador se movió rápidamente en tres ocasiones.

El AC Milan fue el primero en abrir el marcador, gracias a una impecable asistencia de Christian Pulisic, quien se mostró muy cómodo desde el inicio. Pulisic habilitó al delantero serbio Luka Jović, que no desperdició la oportunidad y anotó el 1-0 para los italianos.

El dominio de Milan no se detuvo ahí. Apenas cinco minutos después del primer tanto, Pulisic encontró el momento perfecto para lucirse y, tras una genial asistencia de Rafael Leao, el estadounidense aumentó la ventaja del Milan con un gol que dejó a la defensa del Barcelona descolocada. Con un marcador de 2-0, los italianos parecían tener el control total del encuentro.

Sin embargo, el Barcelona no tardó en responder. Con la necesidad de recortar distancias, Robert Lewandowski, el artillero polaco del conjunto culé, aprovechó una oportunidad de gol siete minutos después del segundo tanto milanés. Lewandowski conectó de manera certera un pase dentro del área para poner el 2-1 en el marcador y mantener la esperanza del cuadro español de igualar el partido.

En la segunda mitad, el Barcelona buscó nivelar las acciones y encontrar el tanto del empate. La presión azulgrana dio resultado cuando, una vez más, Lewandowski se alzó como el héroe del equipo al convertir un estupendo centro en su segundo gol de la noche. El doblete del polaco significó el 2-2 y puso el partido en un emocionante punto de equilibrio.

A pesar de las oportunidades creadas por ambos equipos en el tiempo restante, el marcador no se movió más. El partido llegó al final del tiempo reglamentario con el empate 2-2, lo que llevó la definición a la tanda de penales, donde la presión y la precisión serían cruciales.

En los penales, el AC Milan mostró serenidad y precisión, imponiéndose finalmente por 4-3. Los jugadores milaneses no fallaron bajo la presión, mientras que los azulgranas no lograron superar al guardameta rival en más de una ocasión.