Mike Shanahan se propuso que los Redskins de Washington fuesen un equipo disciplinado y exitoso. Pero su plan maestro se desintegró rápidamente en 2013, costándole su puesto el lunes, un día después de que el equipo terminó la temporada regular con una decepcionante marca de 3-13.
Shanahan, ganador de dos títulos del Super Bowl en Denver, fue uno de los cinco entrenadores de la NFL que fueron despedidos apenas se bajó el telón de la temporada. Leslie Frazier (Vikings), Greg Schiano (Buccaneers), Jim Schwartz (Lions) y Brad Chudzinski (Browns) fueron los otros que se quedaron sin empleo.
El despido de Shanahan se concretó tras reunirse en la mañana con el dueño Dan Snyder y el gerente general Bruce Allen. La salida del entrenador era algo que se esperaba desde hace varias semanas al acumularse las derrotas y acentuarse las tensiones entre Shanahan, Snyder y el estelar QB Robert Griffin III.
En cuatro temporadas en Washington, Shanahan registró marca de 24-40. Aún le quedaba un año en su contrato de $ 35 millones de dólares por cinco años.
Snyder deberá buscar a su octavo entrenador en jefe para su 16ta temporada como propietario de los Redskins. Apenas puede presumir cuatro campañas con más victorias que derrotas, así como un par de triunfos en los playoffs. El equipo ha quedado último en la División Este de la Conferencia Nacional en siete ocasiones.
Con John Elway como mariscal de campo de los Broncos, Shanahan se consagró campeón del Super Bowl tras las temporadas de 1997 y 1998. Pero sólo ganó un partido de postemporada en sus últimos 10 años con el equipo de Denver y fue despedido tras la temporada 2008.
A lo largo de 20 años, el récord de Shanahan en temporada regular es de 170-138, dirigiendo a los Raiders de Los Ángeles, Broncos y Redskins. El 3-13 de este 2013 ha sido el peor balance de los Redskins desde 1994, con una racha de ocho derrotas al hilo que es la más prolongada en más de 50 años.
Resultados adversos y expectativas que no se cumplieron precipitaron los otros despidos.
— Una campaña después de clasificarse a los playoffs, los Vikings se desprendieron de Frazier tras terminar con marca de 5-10-1. Minnesota dio marcha atrás por culpa de una pésima defensa y el flojo desempeño de su QB Christian Ponder.
— Detroit inició el año con marca de 6-3, pero luego sólo pudo conseguir una victoria más para cerrar con 7-9. Schwartz pagó los platos por el segundo colapso del equipo en la segunda mitad de la temporada, luego que los Lions avanzaron a los playoffs en 2011.
— Los Buccaneers despidieron a Schiano tras acumular un mediocre récord de 11-21 en las últimas dos temporadas. Tampa Bay arrancó el año con ocho derrotas seguidas, dejando ir al QB Josh Freeman.
— Chudzinski apenas pudo durar un año al mando de los Browns, cuya derrota el domingo 20-7 en Pittsburgh coronó una temporada con balance de 4-12. Cleveland perdió sus últimos siete partidos. El despido de Chudzinski es el cuarto en seis años por parte de los Browns, que han perdido al menos 10 partidos en seis temporadas consecutivas.