El Real Madrid pone presión al FC Barcelona en la lucha por el título, después de remontar y ganar un asequible partido contra el Espanyol de Barcelona. Pese a empezar perdiendo, los de Ancelotti terminaron superando sin dificultades a un rival que sigue luchando por no descender de categoría y que demostró en Madrid que tendrá muchos problemas para salvarse. César Montes jugó los 90 minutos.

El gol del exmadridista Joselu, que es cuñado, curiosamente, de Dani Carvajal, puso en alerta a un Bernabéu que registró una gran entrada debido al buen tiempo que hacía en Madrid. Pero el gol del Espanyol, en un fallo de Camavinga, apenas fue un espejismo de un partido ampliamente dominado por el equipo blanco cuando y como quiso.

Así las cosas, el Real Madrid remontó en apenas ocho minutos, en los que Vinicius, con un golazo, y su compatriota Militao pusieron un rápido 2-1 en el marcador. Con estos tres puntos, el público del Bernabéu ya respiraba, pues se veía a seis puntos del Barca y poniéndole presión de cara a la difícil visita que los azulgrana tienen mañana en San Mamés.

Pero, siguiendo con el partido, la clave fue el golazo de Vinicius, el octavo de su cuenta particular en LaLiga y una acción individual desde la banda hasta el área, que fue lo mejor del partido.

La segunda parte fue una continuación del dominio madridista, pero con la reivindicación de dos jugadores que todavía no han renovado con el Real Madrid y cuya continuidad está en duda: Marco Asensio y Nacho Fernández. El Bernabéu quiere que ambos sigan, y especialmente venera la profesionalidad de Nacho, un defensa que siempre lo hace bien y lleva muchos años de servicio en el club desde su entrada cuando era un niño.

AP

Nacho alucinó al Bernabéu con una jugada de crack, conduciendo todo el campo hasta darle una asistencia magistral a Asensio, que no celebró el gol de forma exultante a causa de una renovación de contrato que no acaba de llegar.