A un año de la Copa del Mundo de Qatar 2022, las condiciones laborales de las personas involucradas en la construcción de los estadios siguen sin mostrar una notable mejoría, además de que se desconoce el número de muertes que se han registrado en las instalaciones, las cuales se podrían contabilizar por miles de acuerdo a diversas fuentes, muchas más de los jugadores que disputarán el certamen.

Si bien la Organización Internacional del Trabajo (OIT) salió a media semana a señalar que no son 6,500 migrantes fallecidos en las construcciones y que esa cifra corresponde al número total de muertos con esa condición en Qatar de 2010 al día de hoy, independientemente del trabajo que realicen en el país, permanecen las dudas, ya que existen nubarrones que impiden conocer la cifra con certeza.

En febrero de 2021, el prestigioso diario inglés The Guardian, quien citó diversas fuertes gubernamentales de varios países, señaló que dicho número es solo por trabajadores llegados de Pakistán, India, Nepal, Bangladesh y Sri Lanka, sin contabilizar a los de países como Filipinas o Kenya, otros dos grandes exportadores de mano de obra.

Condiciones laborales de pesadilla

Desde que comenzaron las obras a inicios de 2010, diversas organizaciones a favor de los derechos humanos alzaron la voz por las complicadas condiciones de los trabajadores, quienes han tenido que lidiar con impagos, la confiscación de pasaportes, exceso de horas de trabajo a pesar de las condiciones climáticas, hacinamiento e insalubridad, aunque los avances fueron pocos. También se subraya especialmente el llamado sistema ‘Kalafa’ (patrocinio en árabe), el cual ‘ata’ a los empleados a sus contratantes, más allá de que se ha buscado abolir.

Los primeros llamados fueron a marcas comerciales como Adidas, Visa y Coca Cola y otros grandes socios comerciales, quienes urgieron a la FIFA que analizara dicha situación, aunque no fue sino hasta 2017 cuando Qatar comenzó a dar forma a una serie de reformas que favorecieron a los migrantes, quienes desde entonces empezaron a disfrutar de ciertos derechos, aunque no cumplidos en su totalidad.

¿Con qué benefició Qatar a los migrantes en 2017?

  • Regulación del horario laboral
  • Tribunales laborales para facilitar el acceso a la justicia
  • Fondo para contribuir al cobro de salarios retenidos
  • Salario mínimo
  • Se retiró el permiso de salida del emirato.

Sin embargo, no todo se da como quedó plasmado en papel, algo que fue señalado recientemente por Amnistía Internacional en el documento ‘Real Check 2021: A year to the 2022 World Cup. The state of migrants worker’s rights’, en la que señaló que las complicaciones laborales se sostienen en la sede de la Copa del Mundo.

“El pasado mes de agosto, Amnistía Internacional documentó la pasividad de las autoridades qataríes a la hora de investigar la muerte de miles de trabajadores y trabajadoras migrantes, pese a la existencia de una relación demostrada entre las muertes prematuras y la falta de seguridad en el trabajo. A pesar de la instauración de ciertas salvaguardias nuevas para los trabajadores, los graves riesgos persisten, por ejemplo, las nuevas normativas no incluyen periodos de descanso obligatorios acordes al clima o al tipo de trabajo desempeñado- y las autoridades han hecho poco por investigar el elevado número de muertes no explicadas”, señaló.

Jugadores y selecciones se expresaron

El tema de los derechos humanos no ha pasado por largo para diversos representativos y jugadores, quienes han lamentado las condiciones laborales para los migrantes que prevalecen en Qatar.

Países Bajos, Alemania, Noruega, Dinamarca, Finlandia y figuras como Tony Kross o Erling Haaland, han mostrado su desaprobación de forma abierta, aunque eso tampoco ha sido suficiente para modificar la imagen de la Copa del Mundo 2022, una que se está tornando de vergüenza.