Desde que la pandemia de coronavirus interrumpió la temporada de la NBA, Giannis Antetokounmpo pasa la mayor parte del tiempo haciendo ejercicio, cuidando a su hijo recién nacido y ocasionalmente divirtiéndose con los videojuegos.
Lo que el reinante Jugador Más Valioso no puede hacer es lanzar a la canasta, debido a que la NBA cerró los centros de práctica.
“No tengo acceso a un aro”, reconoció el pívot de los Bucks de Milwaukee en una conferencia telefónica el viernes. “Muchos jugadores podrían tener una cancha en su casa o algo similar, no lo sé, pero ahora sólo hago mis ejercicios en casa, en la bicicleta, caminadora, pesas y me mantengo fuerte de esa forma”.
La emergencia de salud ha forzado a miles de deportistas, incluidos los profesionales, a trabajar desde casa e intentar mantenerse en forma. El equipo al que tienen acceso también varía entre los distintos jugadores.
“Todo recae en lo que tienen y qué pueden hacer”, dijo el coach de los Hawks de Atlanta Lloyd Pierce. “Podemos hacer muchas pesas, así se mantienen listos. Eso es lo más que puedo ofrecer como entrenador para que se mantengan listos. No les puedo decir, ¿puedes encontrar acceso a un gimnasio? Eso sería una mala gestión de mi parte”.
Por ejemplo, Pierce dice que el base de los Hawks Kevin Huerter tiene acceso a un gimnasio en Nueva York y Jeff Teague es dueño de otro en Indiana.