Jesús Aguilar abrió la noche para los peleadores mexicanos con victoria ante el australiano Shannon Ross apenas a los 17 segundos del primer asalto.

El mexicano soltó un volado de derecha sobre el rostro de su rival que conectó de lleno y que lo mandó de inmediato a la lona.

Aguilar sabía que lo había finalizado, por lo que no intentó hacerle más daño a su rival, que ya estaba inconsciente sobre la lona.

Esta fue la primera victoria por nocaut del nacido en Ensenada, Baja California, ya que de sus ocho victorias previas, seis habían sido por sumisión y dos por la vía de las tarjetas.

“Me siento increíble, nunca me había sentido mejor, este es el sueño de mi vida, necesitaba ganar aquí, la vez pasada terminé llorando, pero esta vez voy a llorar de felicidad”, mencionó Jesús al final de la pelea en la función de UFC 290, que cuenta con la participación de cinco mexicanos.

El tricolor, en forma, de broma, le hizo saber a Dana White, presidente de la compañía, que lo apunte para los bonos de la noche, ya que el nocaut fue uno de los más espectaculares en lo que va del año.

Aguilar se repone de una derrota que había sufrido en su presentación de UFC, pues en el UFC Fight Night 218 del pasado 4 de febrero, perdió por sumisión en el primar asalto ante el japonés Tatsuro Taira.