El presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, dijo el viernes que no renunciará al cargo a pesar de la polémica provocada por su beso supuestamente no consentido con la futbolista Jenni Hermoso.
Durante la asamblea extraordinaria de la RFEF, Rubiales repitió cuatro veces “No voy a dimitir”, además, dijo ser víctima de una caza de brujas por parte de “falsas feministas”.
El discurso y decisión del directivo no fue bien recibido, especialmente por el futbol español. El delantero del Betis, Borja Iglesias renunció a la Selección tras la asamblea y el histórico portero, Iker Casillas, criticó al directivo.
A través de sus redes sociales, Iker Casillas, dio a conocer su postura con respecto a lo sucedido con el directivo de la Real Federación, asegurando que fue una: “Vergüenza ajena’.
Además, en una publicación posterior, el exportero de la Selección Española lamentó que días tras el logro obtenido por la Selección Femenil al ganar el Mundial, el tema del día sea la polémica de Rubiales y no el campeonato del mundo.
“¡Tendríamos que estar estos 5 días hablando de nuestras chicas! ¡De la alegría que nos dieron a todos! De presumir de un título que no teníamos en el fútbol femenino pero…”, compartió Casillas.