Stenton Bennett lanzó dos pases de touchdown, la defensiva de Georgia se dobló, pero no se quebró en zona roja y los Bulldogs se coronaron campeones del football colegial tras derrotar 33-18 a Alabama en el College Football Playoff Championship Game, en el Lucas Oil Stadium de Indianapolis.

El quarterback de Alabama y ganador del Heisman, Bryce Young, pasó para 369 yardas y un touchdown, pero fue interceptado en dos ocasiones, incluido un pick 6 en el último minuto.

Bama llegó al juego sin uno de sus dos mejores wide receivers, John Metchie, quien sufrió una lesión en la rodilla en el Campeonato de la SEC, y este lunes perdió a Jameson Williams, quien se lesionó la rodilla en la primera mitad y ya no pudo regresar al juego por el título.

Después de una mediocre primera mitad, Bennett completó 17 de 26 para 224 yardas, mientras los Bulldogs amasaron 140 yardas terrestres, incluidas 84 de Zamir White y 77 de James Cook.

De tres en tres

Parecía que la defensiva de Georgia anotaba el primer touchdown del campeonato cuando Young fue capturado, perdió el balón y el fumble fue llevado hasta las diagonales, pero tras revisar la jugada los oficiales declararon pase incompleto y todo quedó en un susto para Alabama.

El drive llegó hasta la 19 de los Bulldogs y terminó con un gol de campo de 37 yardas de Will Reichard para poner a funcionar el marcador, 3-0 en favor del Crimson Tide.

En una batalla de goles de campo, Jack Podlesny conectó una patada de 49 yardas, su más larga de la temporada, para el 9-6 favor Alabama, a 3:09 del final de la primera mitad.

Es la primera vez en la historia del CFP Championship Game que no hay touchdowns en los dos primeros cuartos.

Bama y Georgia solo convirtieron seis terceros downs y se combinaron para 36 yardas terrestres en los 30 minutos iniciales.

La mejor defensa prevalece

Bama montó una larga serie de 17 jugadas que recorrió 68 yardas en 7:45 minutos, pero el equipo del coach Nick Saban se fue con las manos vacías cuando el intento de gol de campo de Reichard fue bloqueado por Jalen Carter.

En la siguiente jugada, James Cook se escapó 67 yardas por la banda izquierda hasta la 13 de Alabama. Esa fue la carrera más larga permitida por el Crimson Tide desde octubre de 2015 (Nick Chubb, 83 yardas).

Tres jugadas después, Zamir White logró el primer touchdown del campeonato en jugada de una yarda, que le dio vuelta al marcador, 13-9 en favor de Georgia, al final del tercer cuarto.

Un pase de Young de 28 yardas a manos de Agiye Hall dejó a Alabama en la yarda cinco de los Bulldogs. Pero sus dos envíos a las diagonales fueron incompletos y Reichard hizo bueno su cuarto gol de campo de la noche para el 13-12 en Indianapolis.

En una controversial llamada de los oficiales, un fumble de Bennett (quien intentaba lanzar un pase) fue recuperado por Brian Branch en la 16 de Georgia.

Un castigo de rudeza al pasador ayudó a Alabama y en tercer down el Crimson Tide finalmente entró a la zona final, cuando Young encontró a Cameron Latu en jugada de tres yardas para devolverle la ventaja a Bama, 18-13 (fallaron la conversión).

La respuesta de Bennett fue inmediata. Le tomó solo cuatro jugadas para lanzar su primer pase de touchdown de la noche, un arcoiris de 40 yardas que Adonai Mitchell le ganó al defensivo para el 19-18, porque los Bulldogs tampoco pudieron hacer la conversión de dos puntos.

Georgia puso el juego fuera del alcance de Alabama con el segundo pase de anotación de Bennett, a manos de Brock Bowers, quien se escapó 15 yardas hasta las diagonales.

La defensiva de los Bulldogs, la mejor del football colegial toda la campaña, selló el título con una intercepción que Kelee Ringo se llevó 79 yardas hasta la zona final para el 33-18 a 54 segundos de la lluvia de confetti.

Georgia es el segundo equipo desde 1936 que gana 13 juegos por 15 puntos o más en una temporada, algo que solamente había logrado Clemson en 2018.