La alcaldía de Río de Janeiro, una de las ciudades brasileñas más afectadas por la pandemia, aprobó la entrada de público a la final de la Copa América-2021 que se disputará el sábado entre Argentina y Brasil en el Maracaná, que podrá albergar hasta el 10% de su capacidad máxima.

La decisión se tomó “considerando que la entidad organizadora presentó protocolos de operación y acreditación, adoptando mecanismos para proteger la salud de los involucrados, utilizando herramientas adecuadas para la prevención del contagio y la propagación del covid-19”, dijo la autoridad en el diario oficial de este viernes.

El templo carioca podrá recibir hasta el 10% de su capacidad máxima, de 78 mil personas, “en cada sector del estadio”, agrega el boletín oficial. Los asistentes deberán presentar una prueba de antígenos o PCR con resultado negativo para covid-19 tomada hasta 48 horas antes del cotejo y deberán cumplir medidas de distanciamiento dentro del recinto, según la publicación.

La final, entonces, sería el primer partido de la Copa América-2021 que se disputará con hinchada, aunque hasta el momento la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol), organizadora del evento, no se ha pronunciado sobre cómo será la venta de entradas o el ingreso de público.

El torneo comenzó el 13 de junio en Brasilia, con la victoria 3-0 de Brasil sobre Venezuela, en medio de fuertes críticas internas y externas por llevarse a cabo en el segundo país con más muertos por la pandemia (más de 530 mil).

La competición recibió el apoyo del presidente de ultraderecha Jair Bolsonaro, uno de los líderes más cuestionados por su caótico manejo de la pandemia, a dos semanas del comienzo tras las salidas de las sedes originales, Argentina y Colombia.

Río, afectado por la covid-19

La ciudad de Río registra más de 372 mil casos y más de 29 mil decesos, de más de 530 mil en todo Brasil. La tasa de muertes de Río es de 432 por cada 100 mil habitantes, casi el doble de los 252/100.000 h del conjunto del país.