El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, aseguró que el estadio Arena Corinthians, que será sede de seis partidos del Mundial de Futbol 2014, entre ellos el inaugural el próximo 12 de junio entre las selecciones de Brasil y Croacia, estará listo en el “último minuto”.

Valcke se expresó así en una rueda de prensa celebrada tras una visita al estadio, aún en obras, y reiteró varias veces que “no se puede perder ni un minuto más” en la construcción de la infraestructura necesaria para albergar el torneo.

Preguntado sobre los posibles paralelismos entre los retrasos durante la construcción de los recintos que acogieron el Mundial de Sudáfrica de 2010 y los actuales en Brasil, comentó que “no pueden compararse”.

“El mundial de Sudáfrica tuvo muchos atrasos, pero el de Brasil es el de Brasil”, subrayó.

Asimismo, anunció la disputa de un partido que servirá como prueba del estadio el próximo 17 o 18 de mayo, dependiendo del calendario, entre el Corinthians y el Figueirense, por el Campeonato Brasileño.

Sin embargo, la vicealcaldesa de Sao Paulo y coordinadora del Comité Municipal del Mundial (SPCopa), Nadia Campeao, advirtió que durante la reunión celebrada antes de la visita con Valcke; el ministro de deportes de Brasil, Aldo Rebelo, y otras autoridades, se determinó que sólo se utilizará un aforo de 50 mil espectadores.

De este modo no se pondrán en funcionamiento la totalidad de las 68 mil plazas del escenario paulista que cuenta con 48 mil asientos en su graderío permanente y que durante el Mundial contará con 20 mil más para adaptarse al patrón establecido por la FIFA para los partidos inaugurales de los mundiales, con un mínimo de 65 mil.

Campeao también indicó que a partir de la primera semana de mayo y “gradualmente” el Corinthians tiene una programación para probar el escenario ante un número de espectadores que crecerá progresivamente hasta los 50 mil del día del partido oficial de la liga brasileña.

El recinto, actualmente finalizado en un 98 por ciento, fue escenario de un accidente el pasado 27 de noviembre, cuando una grúa que intentaba colocar una pieza del techo se volcó ocasionando la muerte de dos obreros.

La fijación de dicha pieza, el último módulo de la cubierta del techado del estadio, se realizó el pasado 10 de marzo.

El 29 de marzo murió otro obrero que trabajaba en la construcción del Arena Corinthians tras caer de una altura de ocho metros.