Adiós a las malas rachas; en plena Navidad,los Philadelphia Eagles derrotaron a los New York Giants 25-33, dejando atrás aquellas tres derrotas consecutivas y colocándose como líder del Este de la NFC.
Por su parte, Santa Claus no fue bondadoso con los Gigantes, ya que a pesar de que vendieron cara la derrota, sus posibilidades para avanzar a la postemporada son mínimas.
Fiel a su estilo, Jalen Hurts se convirtió en el mariscal con más anotaciones terrestres (15) en una temporada de la NFL, superó a Cam Newton. En el partido tuvo 24 de 38 pases completos, 301 yardas, hizo un TD y tuvo una intercepción.
Dallas Goedert se resbaló y regaló el balón a Adoree Jackson cuando tenían una ventaja de 20-10; un momento que puso en suspenso a todos los aficionados de los Eagles, pues el fantasma de la derrota apareció de nueva cuenta en sus cabezas.
Las águilas jamás se rinden cuando las cosas se ponen feas, la mala racha de tres derrotas les sirvió para regresar más fuertes, moldear su mejor versión y ser aquel monstruo de mil cabezas en la postemporada.
Que no se pierda la tradición, Jalen Hurts puso su icónico tush push navideño que fue la primera anotación del encuentro. Gracias a esta jugada rompió el récord de más anotaciones terrestres en una temporada con 15.
No fue el juego más brillante de los Eagles, pero supieron utilizar todos los recursos que tenían a su alcance, De’Andre Swift fue el jugador más reluciente y quien cargó con el equipo en la espalda.