Javier Hernández se convirtió nuevamente en un futbolista inmerso en el ojo del huracán y esta vez debido a que se negó tomar una foto con un niño.
En un video publicado en Instagram, se observó al Chicharito que iba bajando del camión donde transportaban al equipo y de repente un niño llegó de forma eufórica a querer tomarse la foto con él y que le firmara su playera.
El niño iba muy emocionado, pero Hernández terminó de inmediato con su euforia al decirle que no se iba a tomar la imagen con él. Siguió unos pasos adelante y se acercó a otro grupo de fans en donde se tomó una que otra selfie, pero guardando su distancia.
Esto generó la molestia de los usuarios en redes sociales que criticaron la postura del mexicano, al no querer tomarse la foto del aficionado y recibió todo tipo de adjetivos y palabras negativas en contra.