Sergio ‘Checo’ Pérez largará desde la octava posición en el Gran Premio de Austria tras una clasificación donde volvió a mostrar los problemas de degradación que ha tenido durante todo el fin de semana.
Ante esta situación, el mexicano explicó que el haber gastado dos sets de neumáticos nuevos en la Q1, condicionó el resto de la sesión.
“Al principio creo que la pista estaba muy verde, no había mucha diferencia con el neumático nuevo y en la Q1 acabamos poniendo dos, que eso nos perjudicó totalmente para la Q3. Me quedé a cuatro décimas del P2, entonces con llantas usadas en Q3 era complicado. Se degradaban mucho durante la vuelta y eso perjudicó un poco”, dijo en zona mixta.
Además, señaló que le ha costado más trabajo que a Verstappen adaptarse a los cambios que realizó Red Bull en el monoplaza de cara a este Gran Premio.
El neumático nuevo contra el usado, en una pista con mucha degradación, tiene un impacto entonces sí hubo algo en ese sentido. No estamos maximizando el potencial de nuestro lado. Parece que necesito más tiempo de adaptación que Max con los cambios que hicimos. Esperemos mejorar para mañana el tema de degradación y ritmo de carrera.