Una interferencia cambió los abucheos de los asistentes al Raymond James Stadium en ovaciones para sus Buccaneers y una presión hostil para los Saints que dejaron ir una ventaja de 13 puntos en el último cuarto. Tom Brady llevó a su ofensiva a la zona de anotación en un par de ocasiones con tres minutos en el reloj.

Los ‘Bucs’ se hicieron del liderato de su división tras colocarse con marca de 6-6 en 2022 con el veterano mariscal de campo emulando lo que hizo en el Super Bowl LI cuando venció el tiempo extra a los Falcons, actuales rivales divisionales. Brady no remontaba un déficit de 13 puntos el último capítulo desde que lo hizo en contra de Atlanta en el único Super Bowl en la historia definido en tiempo extra.

La ofensiva de Tampa Bay encontró la coordinación y el ritmo necesario en el momento clave del encuentro. Tras el castigo en contra del esquinero Paulson Adebo los locales resucitaron de una actuación de menos a más y con la coordinación que les faltó durante todo el encuentro, fueron capaces de revertir el marcador.

Brady dedicó la victoria a su hija Vivian que cumplió 10 años.