Brasil demostró que su autoridad al derrotar 3-1 a Francia en el Stade de France, pese a verse abajo en el marcador.
Los galos comenzaron con intensidad y estuvieron a punto de abrir el marcador de la mano de Karim Benzema, quien remató de cabeza solo ante Jefferson, pero el arquero brasileño realizó una estupenda atajada.
Fue hasta el 21′, cuando Raphael Varane remató en un tiro de esquina para marcar el primer gol del partido.
Los dirigidos por Dunga no se darían por vencido y comenzaron a presionar al arquero del Marsella, Mandanda, con disparos de media distancia. Sin embargo, una gran combinación entre Oscar y Firmino, provocó el gol del empate al 40′ por parte del volante del Chelsea.
La segunda mitad no varió mucho, pues Francia tenía la posesión del balón y Brasil buscaba ser más vertical, táctica que le dio frutos, pues al 57′, Neymar recibió un gran pase de Willian para fusilar al arquero francés y poner el 2-1 en el marcador.
A partir de ahí, la canarinha jugó mejor y más suelto. Fue entonces cuando, al 69′, un gran cabezazo de Luiz Gustavo sentenció el partido y apagó la euforia de los franceses.
El equipo de Dunga dio un golpe de autoridad con este resultado, pues aún buscan quitarse la mala imagen que dieron en el Mundial pasado contra Alemania, y de paso, recuperar la confianza de cara a la próxima Copa América en Chile.