El Bayern, liderado por el francés Franck Ribery, puso un pie en las semifinales de la Liga de Campeones premiado por su mayor empeño ante el Juventus, que saboreó una derrota después de dieciocho partidos consecutivos invicto en competiciones europeas

El Bayern se aproxima a su segunda semifinal seguida. La tercera en cuatro años. Es uno de los grandes aspirantes al título, que se le escapó por poco en 2012.

Estimulado por su excelente trayecto en la Bundesliga, reciente aún la histórica goleada frente al Hamburgo (9-2) y sin el español Javi Martínez, sancionado, pero con el oxígeno de Bastian Schweinsteiger, impuso su autoridad frente al Juventus.

La estrategia del cuadro italiano se arruinó a los 25 segundos, cuando un lanzamiento lejano, más allá de la media luna, del austríaco David Alaba, que desvió un defensa, sorprendió al meta Gianluigi Buffon.

De forma impensable, un disparo aparentemente intrascendente del lateral del conjunto muniqués marcó el duelo.

En contra de lo esperado, reaccionó bien el cuadro de Antonio Conte, que se hizo con el balón en los minutos siguientes. Una falta lanzada por Andrea Pirlo y un disparo del chileno Arturo Vidal pusieron en órbita a los italianos.

Una acción giró de nuevo el partido. Fue la lesión de Toni Kroos, sustituido al cuarto de hora por Arjen Robben. El holandés, otra vez suplente, revolucionó el juego del equipo alemán. Vivió el Bayern sus mejores minutos.

Pero Robben suele afear su verticalidad con un individualismo y una precipitación que en pocas ocasiones es rentable. El cuadro de Jupp Heynckes se volcó sobre el área de Buffon llevado por el furor del atacante ‘orange’. Y pudo sentenciar casi la eliminatoria.

Robben tuvo dos oportunidades clamorosas. Una se marchó fuera. La otra la deshizo el meta del Juventus, que afrontó el choque con 490 minutos imbatido en Europa. Se quedó a una hora de superar su propio registro. Los 551 que permaneció sin encajar un gol en la campaña 2004-2005.

El inminente campeón alemán apretó el acelerador y el descanso fue lo mejor para el Juventus, que se tambaleaba en cada azote germano.

No se despejó el panorama para el equipo transalpino en la segunda mitad. Al contrario. Un disparo del croata Mario Mandzukic obligó a una gran parada a Buffon.

Hasta que llegó el segundo tanto, que nació de un disparo lejano del brasileño Luiz Gustavo que no atajó el meta italiano. El rechace le llegó a Mandzukic, que pasó el balón a Thomas Muller y éste marcó a puerta vacía.

Antonio Conte reaccionó de inmediato. Retiró a la vez a Alessandro Matri y Fabio Quagliarella y dio entrada a Mirko Vucinic y Sebastian Giovinco.

Ganó en profundidad el Juventus, acosado por la necesidad y la precipitación. El Bayern se movió a su antojo liderado por el francés Frank Ribery, que impuso el ritmo.

Con más espacios, el bloque de Heynckes dispuso de llegadas más peligrosas que las de su adversario. Manuel Neuer apenas tuvo que emplearse. Buffon ofreció más protagonismo y evitó una derrota mayor.

Ficha técnica:

Bayern Múnich: Manuel Neuer, Philipp Lahm, Daniel van Buyten, Dante, David Alaba, Bastian Schweinsteiger, Luiz Gustavo, Thomas Müller, Toni Kroos (Arjen Robben, m.16), Franck Ribéry (Xherdan Shaqiri, m.90) y Mario Mandzukic (Mario Gomez, m.90).

Juventus: Gianluigi Buffon, Andrea Barzagli, Leonardo Bonucci, Giorgio Chiellini, Stephan Lichtsteiner, Arturo Vidal, Andrea Pirlo, Claudio Marchisio, Federico Peluso (Paul Pogba, m.75) , Alessandro Matri (Sebastian Giovinco, m.65) y Fabio Quagliarella (Mario Vucinic, m.65) .

Goles: 1-0, m.1: Alaba. 2-0, m.63: Muller.

Arbitro: Mark Clattenburg (Inglaterra) . Mostró tarjeta amarilla a Mario Mandzukic y Luiz Gustavo, del Bayern, y a Giorgio Chiellini, Arturo Vidal y Stephan Lichtsteiner, del Juventus.

Incidencias: encuentro de ida de las eliminatorias de cuartos de final de la Liga de Campeones disputado en el estadio Allianz Arena de Múnich ante unos 68.000 espectadores.