Con un triunfo de 1-0 sobre el Stuttgart conseguido en el último minuto, Bayern Munich concluyó la campaña de la Bundesliga para después recibir el trofeo que los acredita como Campeones de Alemania, y crear una de las celebraciones más especiales en la carrera de Pep Guardiola, quien se vio bañado en cerveza por sus jugadores.
Un agónico gol de Claudio Pizarro desató la locura en el Allianz Arena, donde los bávaros festejaron y sostuvieron en sus manos el platón 24 en su historia, ante los cánticos de su gente que olvidó el final en Champions League y se dedicó a disfrutar su éxito local.
En el clímax de la celebración, el estratega español, Josep Guardiola fue bañado por sus jugadores y tiró el trofeo de Campeones, aunque este no sufrió daño alguno y el festejo se incrementó entre risas y gritos de victoria.
Bayern Munich y Pep Guardiola tienen en puerta el torneo de la Supercopa Alemana ante el Borussia Dortmund, por lo que los festejos deberán ser breves para estar metidos en el duelo por el cuarto título en la Era Guardiola, tras haber cosechado Supercopa de Europa, Bundesliga y Mundial de clubes.