El Barcelona intenta hoy encontrar remedio a su tristeza ante el Deportivo La Coruña, en un partido en el que el equipo blaugrana necesita un triunfo para alimentar la esperanza de remontar su siguiente cita ante el Milán en la Liga de Campeones de Europa.
El duelo, correspondiente a la jornada 27 de la Liga española, tiene más importancia anímica que numérica para el Barcelona. Al contrario de lo que le sucede a un cuadro de La Coruña lleno de urgencias.
Por el momento, el Barcelona mantiene una situación envidiable en la Liga española, gracias a su ventaja de 11 puntos sobre el Atlético de Madrid y 13 con el Real Madrid, pero un resultado adverso ante el colero encendería aún más las luces de alarma.
Pero más que por los puntos de la Liga, el Barcelona aparece interesado en recuperar sensaciones, después de días mucho más que complicados tras su derrota ante el Milán y las dos caídas consecutivas ante el Real Madrid.
En los últimos días, mucho se habló de la eventual “tristeza” de Lionel Messi, cosa que él mismo rechazó esta semana. Pero ayer el técnico interino del Barcelona, Jordi Roura, reconoció que los últimos resultados generaron melancolía en todo el vestuario.
“Cuando no acabamos de mostrar el nivel que solemos tener, es normal que los jugadores estén tristes. Pero estos días hemos trabajado bien. Veo al equipo con ilusión y ganas de remontar el partido ante el Milán”, afirmó el también auxiliar técnico culé.
El ayudante de Tito Vilanova dejó claro que “el partido de mañana [hoy] es muy importante” para su equipo en su intento de “mantener la distancia en la Liga”. Pero la realidad parece otra, ya que el cuadro culé sólo tiene ojos para el partido del martes ante el Milán, en el que el conjunto azulgrana está obligado a remontar un 2-0 adverso si quiere seguir vivo en la Liga de Campeones.
El propio Roura reconoció que las alineaciones de hoy y la del martes “pueden ser diferentes” y habrá descanso para futbolistas importantes.
Llegado a este punto, es obvio especular con la posibilidad de que Messi se quede en el banquillo, aunque también se da por seguro que el argentino está ansioso por jugar cualquier partido, tras recibir críticas por sus últimas actuaciones.
“Decidiremos mañana [hoy] si Leo juega o no ante el Deportivo”, fue todo lo que Roura dijo al respecto.
Barcelona jugará sin Xavi Hernández, quien se recupera de una lesión muscular, y sin Víctor Valdés, sancionado con cuatro partidos por sus insultos al árbitro del último clásico.