La temporada de Aaron Rodgers llegó a su fin. Pero todo indica que no está listo para que termine su carrera.

“La noche es más oscura antes del amanecer”, escribió el quarterback de los New York Jets en Instagram el miércoles por la noche. “Y me levantaré una vez más”.

Rodgers se perderá el resto de la temporada por una ruptura del tendón de Aquiles izquierdo, lesión que sufrió en la cuarta jugada de su partido de debut con su nuevo equipo el lunes por la noche. El quarterback de 39 años no había comentado nada públicamente desde que se lesionó en la victoria de los Jets por 22-16 en tiempo extra sobre los Buffalo Bills.

“Agradezco a todas las personas que se acercaron, llamaron, enviaron mensaje de texto o mensaje directo, se conectaron a través de un amigo…”, escribió Rodgers. “Ha significado mucho para mí y trataré de comunicarme con ustedes pronto.

“Estoy completamente desconsolado y atravesando todas las emociones, pero profundamente conmovido y honrado por el apoyo y el amor que me muestran. Por favor, manténganme en sus oraciones y pensamientos mientras comienzo hoy mi proceso de recuperación”.

Rodgers cerró su publicación con un mensaje para sus compañeros: “Orgulloso de mis muchachos, 1-0”.

Ha habido dudas sobre si Rodgers puede considerar el retiro, aunque eso no es lo que piensa Robert Saleh, el entrenador en jefe de los Jets.

“No he tocado el tema con él”, dijo el estratega el miércoles. “Quiero decir, estaría sorprendido si esta es la forma como se va a despedir. Pero al mismo tiempo, están pasando muchas cosas por su mente con las que tiene que lidiar Ese será el último tema del que hablé con él”.

A pesar de su publicación en Instagram, seguramente será una conversación que se debe tener con el quarterback de 39 años, quien de acuerdo con Saleh, ha estado teniendo consultas médicas para determinar cuál será su siguiente paso, que incluirá una cirugía.

Rodgers encara una larga y ardua recuperación y rehabilitación de la lesión. Cumplirá 40 años en diciembre y ha considerado retirarse en el pasado. En febrero decidió que quería seguir jugando, y que quería hacerlo con los Jets.

Su traspaso a Nueva York, procedente de Green Bay en abril, reanimó las expectativas para una franquicia que lleva 12 años sin clasificarse a los Playoffs, al punto de ser considerada como candidatos de ir al Super Bowl.

Ahora, Rodgers no podrá contribuir en el campo el resto de la temporada, pero los Jets desean que todavía pueda ayudar al equipo a ponerle fin a la sequía de Postemporada al seguir conectado con sus compañeros de equipo y entrenadores.