A finales de 2020 el gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador anunció una estrategia integral para la reducción de homicidios. Se basó en la atención de «15 municipios prioritarios».

El criterio fue atender a «los más violentos de México»; sin embargo, seis meses después, en 2021, mientras aumentaban los homicidios en todo el país, la lista se amplió a 50 localidades.

La estrategia de ubicar medio centenar de alcaldías resultó una réplica de la ejecutada en 2016 por el expresidente Enrique Peña Nieto. Incluso, 36 municipios determinados en el presente gobierno ya habían formado parte del listado del gobierno anterior. En esto coincide un análisis publicado en 2021 por la organización México Evalúa.

Estos territorios llevan siete años padeciendo una espiral de violencia que parece no tener fin. En algunos casos el número de homicidios aumentó con todo y estrategia preventiva y de contención.

Por ejemplo, Zamora, Michoacán, pasó de tener una tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes de 28 en 2015, a 163 en 2022. El segundo registro más alto del país.

Fresnillo, Zacatecas, pasó de registrar 33 asesinatos por cada 100 mil habitantes en 2015 a 105 en 2022. A pesar de que su tasa por homicidios se triplicó en ese periodo no fue seleccionado en el primer filtro de 2020 que lanzó el gobierno federal actual. Fue ingresado hasta 2021.

Estas regiones muestran las fallas de las estrategias de los gobiernos de Peña Nieto y López Obrador. se seleccionaron municipios en donde se concentra 50 por ciento de los homicidios a nivel nacional, pero lo hicieron tomando en cuenta el número absoluto de asesinatos y dejando de lado contextos sociales y elementos como la tasa de incidencia del delito, es decir, no priorizaron lugares donde sus pobladores son más propensos a ser víctimas de homicidio, coinciden especialistas en seguridad consultados.

Álvaro Vizcaíno, exsecretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública e investigador invitado del Instituto Nacional de Ciencias Penales (Inacipe), asegura que debe haber criterios diferentes para evaluar los municipios que están en la lista. Explica que la cantidad no es lo relevante, sino sus problemáticas y sus metas.

Según datos obtenidos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública que fueron analizados, hay por lo menos 10 alcaldías que se encontraban en la lista de municipios prioritarios de 2016 y que, con base en sus cifras, tendrían que haber permanecido en el primer listado de 2020, pero no fue así. Y es que sus tasas de homicidio se ubican por encima de la nacional o han aumentado durante este sexenio.

Hay otro problema que no se ha abordado en el plan de contención de homicidios dolosos en México: el presupuesto en seguridad de los estados, un elemento indispensable para implementar cualquier estrategia, de acuerdo con el especialista del Inacipe.

El Subsidio para el Fortalecimiento de la Seguridad en Entidades Federativas y Municipios (Fortaseg), que se otorgaba a los municipios y, en su caso, a los estados cuando ejercían la función de seguridad pública, inició en 2016 con un monto de 5 mil 952.7 millones de pesos. En 2020, éste se redujo a 4 mil millones de pesos y en 2021 desapareció del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).