Una serie de explosiones en la ciudad belga de Bruselas han dejado este martes un saldo de 34 muertos y 136 heridos.

Las detonaciones, al menos una de ellas causada por un suicida, sacudieron el aeropuerto y al metro de la capital belga, provocando el cierre de la ciudad y elevando la seguridad en toda Europa.

Bélgica elevó su nivel de alerta a grado más alto, desvió trenes y autobuses con destino a la ciudad, ordenó a la población que se quedara dónde estaba y cerró su frontera con Francia.

Unas horas después de estos actos, el Estado Islámico (ISIS) se adjudicó los atentados.

Responsables de seguridad en el Viejo Continente llevaban semanas preparadas para un gran ataque, y advirtieron que el grupo extremista estaba preparándose para actuar.

“El metro salía de la estación de Maelbeek cuando hubo una explosión que sonó muy fuerte. Había pánico por todas partes. Había mucha gente en el metro”, dijo Alexandre Brans, de 32 años y que se estaba limpiando la sangre del rostro.

Imágenes de video tomadas por testigos y emitidas en la televisora francesa i-Tele mostraban a pasajeros, incluido un niño que corría con una mochila, huyendo de la terminal en diferentes direcciones arrastrando su equipaje. Otra imagen mostraba a un agente de seguridad que patrullaba dentro de una sala con desperfectos, donde se veía lo que parecían paneles aislantes del techo tirados por el suelo.

Unas horas más tarde, diversos medios belgas mostraron imágenes de los presuntos responsables de los ataques en la terminal aérea.

Hasta el momento no se registran mexicanos heridos o muertos en los atentados.

Belgium