En un juego bajo de nivel, Correcaminos venció por la mínima diferencia a Rayados y así vengó un poco la goleada de 5-1 que sufrieron la semana pasada en Ciudad Victoria.
Aunque Monterrey saltó a la cancha con un cuadro totalmente alternativo al que usan en la Liga MX, en la tenencia de la esférica sí se veían dominadores pero no en la cohesión ofensiva; apenas Guillermo Madrigal y Omar Arellano tuvieron algunas opciones pero sin tino.
A cinco minutos de terminar la primera mitad, el cuadro de la UAT, logró tejer la jugada que los pondría adelante en el marcador, dentro del área, Fernando González, disparó de zurda y envió el balón por debajo de la meta defendida por Juan De Dios Ibarra.
Golpeados por la anotación de Correcaminos, Rayados buscó reaccionar de inmediato pero no encontró los caminos correctos; Gael Acosta, falló dos ocasiones a gol antes del silbatazo de la primera mitad, el juvenil se apresuró en ambas acciones.
En el inicio de la segunda parte, la tónica del partido era la misma: Rayados con el balón pero los de Ciudad Victoria teniendo las aproximaciones.
José Gutiérrez, el mejor jugador de los visitantes y quien siempre se las ingeniaba para aparecer solo frente al marco, falló al 51′ y al 68′, ocasiones que hubieran liquidado el cotejo ante un cuadro regio sin ideas y sin llegada.
Conforme el reloj iba transcurriendo, los dirigidos por Carlos Barra, ponían más esfuerzos para poder darle una alegría a su gente; sin embargo, otra vez aparecía la falta de frialdad para emparejar el marcador, así en tiro desviados de Luis López, Dorlan Pabon y Gael Acosta.
La desesperación albiazul por no anotar se trasladó hacia la afición, quien pedía al equipo poner “huevos”, síntoma del descontento generalizado en el Tecnológico, inmueble que pese a ser un juego copero registró una buena entrada y así todo esto fue el colofón de un partido que pasó de lo irregular a lo aburrido.