Ciudad Victoria, Tamaulipas.- A pesar del panorama complicado que Correcaminos tiene para lograr calificar a la liguilla, matemáticamente todavía hay posibilidades.
El estratega de Correcaminos, Ricardo Rayas es consciente de lo apretado que le resulta a su equipo el pase a la llamada “fiesta grande”.
“La realidad es que ya a lo único que nos tenemos que enfocar es a esa parte (ganar ante Dorados), porque a pesar de que fuimos un equipo irregular hoy tenemos una nueva oportunidad, desgraciadamente nos hemos quedado cortos, pero por lo que ya pasó no puedo hacer más nada”, expresó en conferencia de prensa.
Rayas dijo, la única fórmula de aspirar a la “hazaña” será la mentalidad de los jugadores que logren deshacerse de todos los “contra” y sacar el triunfo.
“Hoy tenemos una nueva oportunidad contra Dorados y hay que matarnos, también los muchachos tendrán que sacar esa personalidad, esa hombría, poner los tamaños para sacar esto de la mejor manera”.
Rayas confía en el once que en los últimos partidos ha enviado a la cancha, además, dijo que el plantel atraviesa por una situación complicada en el tema de las lesiones y la baja de juego de algunos elementos.
“En lo personal con los que he venido jugando en los últimos partidos yo con ellos estoy muy a gusto, es gente que ha demostrado que quiere sacar las cosas adelante y esos deseos al final van a tener una recompensa”.
En el balance de la situación de Correcaminos, al ser un equipo que inició con buenos resultados y después se fue a la baja, Mr. Rayas solamente comentó que la evaluación la entregará al final de la temporada, por lo pronto lo único en lo que pensará será en el duelo ante Dorados.
“Con todo lo que ha pasado nos quedan las experiencias, hay que aprender de ello, nos queda una oportunidad y sobre esa hay que ir, este partido tiene que salirse a morir”.
Al equipo azul – naranja se le complicó durante todo el torneo regular la localía, en este sentido el timonel del plantel comentó lo que significaría para el equipo que el Estadio Marte R Gómez pesara.
“Hoy más que nunca necesitamos que vayan, que nos apoyen, que nos exijan, pueden estar molestos, pero tienen que estar también con nosotros”.
El equipo universitario tendrá que sacar lo mejor de sí, no solo para esperar resultados y lograr calificar, en riesgo también se encuentra su posición en la tabla porcentual.